Ahogan al Tiburón: desafiliado Veracruz de Liga MX

Foto: Felix Márquez / Cuartoscuro

Por Jesús Yañez Orozco

Periodistas Unidos. Ciudad de México. 07 de diciembre de 2019.- Es una de las historias más vergonzantes del balompié nacional. La prevista desafiliación de club Veracruz se concretó ayer, sin rubor alguno,  luego de que Yon de Luisa, presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), y Enrique Bonilla, titular de la Liga Mx, confirmaron que el equipo de Fidel Kuri quedaba fuera del torneo, por lo que no habrá descenso en la temporada 2019-2020.

“El martes se dio la asamblea general de la FMF y por unanimidad se resolvió la desafiliación del Veracruz en sus diferentes divisiones”, dijo De Luisa para el canal TUDN, canal de deportes de la poderosa empresa Televisa –propiedad de Emilio Azcárraga Jean, dueño del club América—, empresa donde trabajaba antes de ser titular de la FMF.

Las autoridades del balompié mexicano aprobaron la desafiliación de los Tiburones luego de abrir una investigación basada en siete puntos que violaban el reglamento de la Liga Mx, por impagos a jugadores y trabajadores, así como adeudos con varios acreedores.

Jorge Reyes Sainz, apoderado de la FMF, y el notario público Jorge de la Huerta Manjarrez se presentaron ayer en las instalaciones del estadio Luis Pirata Fuente, en la ciudad de Veracruz, para notificar la decisión a Fidel Kuri, pero no encontraron al empresario. No obstante, De Luisa aseguró que la desafiliación es un hecho.

Esta resolución involucra una pérdida económica de más de 13.7 millones de dólares –casi 265 millones de pesos– a Fidel Kuri, dueño del equipo, quien no podrá obtener ningún beneficio por los 24 jugadores de la plantilla del club, quienes pasan a tener libertad de negociación para cambiar de equipo.

El martes pasado, Kuri, ex diputado local en Veracruz por el Partido Revolucionario Institucional, responsabilizó a Televisa y la FMF en caso de algún daño a él y sus familia.

Mantendrán ascenso

Enrique Bonilla, presidente de la Liga Mx, anunció que con la desincorporación del plantel veracruzano no habrá descenso en la temporada 2019-2020, aunque señaló que se mantendrá el ascenso al reiterar que se pretende tener 20 clubes en Primera División.

Al desaparecer el descenso en esta temporada, se ven beneficiados Atlas, Juárez, San Luis y Chivas, que se encuentran en los últimos puestos de la tabla de cocientes y corrían riesgo de quedar fuera del máximo circuito del futbol mexicano.

Bonilla indicó que las estadísticas generadas por el club Veracruz en el torneo Apertura 2019 desaparecerán. Todos los puntos y goles que se generaron en la estadística se eliminan, dijo al canal Fox Sports, por lo que se borraría la racha de 41 partidos sin ganar.

Aseguró que Fidel Kuri era consciente de que estaba obligado a pagar las deudas que tenía el club desde que lo compró en 2013 bajo el nombre de La Piedad, que después trasladó a Veracruz.

“Todo club que participa en una sede con el nombre de un equipo está ya bajo las reglas de FIFA y tiene que subrogar los compromisos que haya adquirido el plantel que estuvo en esa plaza anteriormente.

“En el caso de La Piedad que fue el que ascendió y se cambió a Veracruz, en el trámite del papeleo se contempló que el club tendría que subrogarse todos los adeudos. Hay un acuerdo firmado. Por un tiempo los reconoció para luego dejar de hacerlo”, dijo Bonilla.

Al adquirir la franquicia, Kuri Grajales heredó las deudas que dejaron las administraciones de Rafael Herrerías (2004 y 2008) y Mohamed Morales (2010 y 2011), en las que destaca el reclamo de 34 millones de pesos por parte de Gustavo Parente, quien fue vicepresidente del club en 2005 y ganó en 2014 un juicio en el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).

Kuri Grajales también tuvo que pagar 120 millones de pesos para evitar el descenso en 2019, además de que el club fue sancionado por la FIFA con la reducción de puntos y 15 mil dólares por no liquidar una deuda al Wanderers de Uruguay por los derechos de formación de Matías Joaquín Santos Arostegui, futbolista que estuvo con los Tiburones en 2017.

Avecinan desempleo

Respecto de la situación de los jugadores de Tiburones, De Luisa afirmó que los futbolistas de todas las categorías de plantel, tanto juveniles como femenil, quedan en libertad para negociar una contratación con cualquier club.

El delantero Cristian Menéndez advirtió que con esta medida muchos jugadores se van a quedar sin trabajo.

“No es algo fácil, no sé si todos van a tener la posibilidad de encontrar equipo: es una situación bastante compleja. A unos quizás les resulta favorable, pero bueno, eso ya es individual, es triste que termine así”, lamentó.

El Polaco, quien fue uno de los 12 jugadores que ayer se presentaron al entrenamiento de los escualos pese a que el equipo ya estaba desafiliado, informó que sólo habían tenido comunicación con el cuerpo técnico y “acatamos las órdenes de presentarnos hoy (ayer) a pretemporada”.

La desafiliación de Veracruz parecía inminente desde el martes cuando se le negó a Fidel Kuri la entrada a la asamblea de dueños de la Liga Mx, por lo que el empresario aseguró que recurriría a tribunales para defenderse.

TV-Azteca sin Tiburones

De acuerdo con el diario El Economista, dentro de la institución legalmente se manejan dos tipos de relaciones laborales, las jurídico-deportivas y las administrativas. En las administrativas, se encuentran los distintos sectores que integran el club: el área de contabilidad, mercadotecnia, comunicación, etcétera, que cuentan con contratos estipulados con la empresa o empresas detrás del Club Veracruz.

Esto involucra, explica el periódico, que los empleados que mantienen contrato vigente continúen laborando bajo la misma empresa, aunque podría cambiar su función. A causa de la desafiliación, es posible que el desarrollo de su trabajo ya no sea necesario.

Ante esto, la Ley Federal del Trabajo indica que los asalariados tendrían que entrar a un esquema de liquidación para finalizar su relación.

El equipo del puerto mantenía ocho principales relaciones comerciales con patrocinios que, ante la circunstancia del club, se perderán.

“Cada uno de los contratos es diferente y tendría que revisarse. Sin embargo, en caso de rescisión o desafilación, se tendría que reclamar o reparar el daño, porque las marcas pierden publicidad y con ello ingresos. La principal finalidad de los patrocinadores es retribución económica mediante la exposición”, comentó a El Economista, una fuente anónima.

En cuanto a los derechos de televisión de Veracruz, corrían a cargo de TV Azteca Deportes; sin embargo, no representan un mayor problema, porque según información del abogado deportivo, Salvador Herrera, los contratos tienden a incluir cláusulas que dependen de la situación deportiva de cada uno de los clubes.

Por ejemplo, los Tiburones, por su posición en la tabla porcentual, tenían un riesgo de descender, por lo que en los contratos con ese tipo de equipos, los derechos de televisión se negocian por torneo o año calendario, por ello las pérdidas son mínimas para el canal que se encargaba de sus partidos.

Respecto a Kuri y la marca, la decisión de la FMF involucra que Fidel no tenga opción para volver a ser considerado como un afiliado. Mientras que la marca del equipo podría ser retomada por otros dueños, en caso de que éste cuente con el interés de saldar las deudas con las que ya cuenta.

Para volver a ver futbol profesional en el puerto, la opción más viable sería un dueño que comience su propio club o que obtenga una filial y la transfiera a la plaza.

Por su parte, el técnico Sergio Bueno, quien dirigió a los escualos en 2010, lamentó que se haya tomado una medida tan dura y radical con el cuadro jarocho, toda vez que ésta no sólo perjudicará al dueño (Fidel Kuri Grajales), sino a todos los que directa e indirectamente están relacionados con el equipo, así como a la afición.

“Seguramente será una gran afectación para el público veracruzano que está acostumbrado a tener futbol de Primera División ya desde hace varios años”, opinó.

“Es una plaza muy particular, muy colorida, que siempre todo mundo va contento, con muchos deseos de ver jugar a su equipo; sin duda hay jugadores y gente vinculada al club que van a perder la posibilidad de seguir en actividad, y eso lastima a todos estos personajes” subrayó.

Decisión de gran impacto

No obstante, consideró que debieron haber existido elementos muy relevantes para que la FMF se viera obligada a tomar la decisión.

“(La noticia) fue un gran impacto, se denuncian muchas irregularidades que no se han podido erradicar de nuestra Liga de futbol, pero al final del día, hay situaciones que están perfectamente establecidas en los reglamentos de la federación y cuando se trata de aplicarlos, digamos, sin contemplación, se llega a estas instancias”.

Analizó:

“Tras este tipo de acontecimientos uno cae en la reflexión o en el análisis crudo de saber que existe un propietario que ha estado incumpliendo, que ha estado reglamentariamente fuera de sitio y que seguramente había sido advertido en innumerables ocasiones y ha hecho caso omiso de recomponer la situación y la federación tiene que establecer estas medida”.

Confió en que este tipo de acciones servirán como ejemplo a otros clubes para que no caigan en irregularidades ni incumplimientos de pagos salariales.

“Estas situaciones invitan a que la misma federación genere protocolos o procedimientos más estrictos, que los clubes en verdad sean sometidos a una evaluación de fondo para ver su solvencia económica, que puedan establecer compromisos con jugadores, entrenadores, otros clubes, tanto nacionales como internacionales, y que haya una vigilancia total y absoluta para que los equipos puedan transitar en la primera división apegados a la salud financiera”.

Y sugirió:

“En la actualidad, los clubes deben estar vigilados para tener la seguridad de que el dinero con el que se manejan provenga de actividades licitas. Este es otro momento relevante para la liga, para seguir tomando cartas en el asunto y tratar de sanear la operación del futbol mexicano”.