Mexicana todoterreno: practica más de 20 deportes profesionales

• Anjuli Ladrón, 35 años de edad, atleta por excelencia

• Considera “salvavidas” y “catapulta” la activación física

• Fue portera de Tigres y Xolos de Liga Mx femenil

• También practicó tenis, softbol, handball, karate, lanzamiento de jabalina…

• Ahora representa a su país en innovadoras disciplinas, como Fut Tenis y Footgolf

Periodistas Unidos/Balón Cuadrado. Ciudad de México. 20 de diciembre de 2021.- Si resulta complicado tener un nivel de élite y sobresalir en un deporte, es mucho más en varias disciplinas. Esta es la impensable historia de Anjuli Ladrón, 35 años de edad. Mujer que no concibe su vida sin el deporte, su motor de vida. Es atleta todoterreno que contrasta en un país sedentario donde alrededor del 70 por ciento de la población –de 127 millones de habitantes- sufre obesidad y sobrepeso.

Y que define su “salvavidas” y “catapulta” de innumerables e inenarrables experiencias.

Desde siempre, Anjuli supo que su mundo giraba en torno a los deportes, pues eran lo único que le daba paz y tranquilidad. Única forma de atemperar su hiperactividad.

Su nombre completo es Anjuli Mariana Ladrón de Guevara Güereña. Nació en Puerto Vallarta, Jalisco, el 7 de octubre de 1986. Tiene licenciatura en comunicación por el Tecnológico de Monterrey.

Fue portera de Tigres y Xolos. También practicó tenis, softbol, handball, karate, lanzamiento de jabalina.  Ahora representa a México en innovadoras disciplinas, como el Fut Tenis y Footgolf.

Para ella, el deporte ha sido una “catapulta”, un medio para tener oportunidades. Ha sido, reconoce, “un salvavidas”, un formador y una parte integral de su vida.

Explica que es “una catapulta”, porque viene de una familia humilde y le dio grandes chances, como irse a jugar por primera vez a Estados Unidos, a los 11 años, a un equipo de mujeres. Después militaría en Rusia, Ucrania y España.

El inglés que habla, afirma, es gracias a eso. “Representé a mi país desde los 13 años hasta los 28; tuve una beca deportiva en el Tec de Monterrey gracias a él”.

Y es, detalla, “un salvavidas”, porque siempre en los momentos más difíciles es lo que la ha sacado adelante.

“Por ejemplo, en 2002 perdimos mi casa por el huracán Kenna; fue una situación muy complicada. Tenía 15 o 16 años, una edad complicada, y siempre tuve el balón a mi lado y este escape de expresarme, de sentir, de distraerme”.

Reconoce que el deporte ha sido algo que la ha mantenido emocionalmente estable.

“Justo me ha ayudado a explorar todo lo que tengo adentro. En 2008, mi madre falleció y tuve la oportunidad de irme a jugar a Ucrania, entonces lo vi como una señal divina”.

Narra que “es integral”, porque le ayuda a tener un balance entre su yo interno y su vida profesional.

“El deporte me mantiene como una niña que hace lo que tanto le apasiona”, dijo en charla con Metro World News.

Era, describe, una niña con mucha energía, muy consentida, berrinchuda fue la última, aclara, “el pilón”.

Tiene tres hermanas mayores y sus personalidades siempre han sido muy definidas.

“Yo era la deportista de la familia, jugando todo. Era lo único que me mantenía quieta y tranquila. Tenía unos calendarios desde muy chiquita de ir a entrenar tres veces a la semana futbol, dos veces tenis y, enfrente de la farmacia de mi mamá, había clases del DIF –Desarrollo Integral de la Familia– de Karate Do. Toda la semana hacía deporte”, explica.

Y resume:

“Es algo que ya traía y me hacía feliz”.

Una atleta nata, aunque reconoce que su gran amor es el futbol, que jugó profesional con Xolos y Tigres en la Liga MX Femenil.

Pero lo cierto es que  resulta casi interminable la lista de disciplinas que ha realizado con éxito a lo largo de su trayectoria.

Después de iniciar en el futbol, hizo tenis, karate do. Luego de que cortaron las edades en las olimpiadas nacionales, emigró al lanzamiento de jabalina, que descubrió en la secundaria, y fue a dos torneos Nacionales.

También actuó en dos olimpiadas de handball. Después fue a un nacional de box y a la par estaba con beca en el Tec de Monterrey de futbolista.

Luego, practicó squash, waterpolo, halterofilia.

Ya más grande, en la ciudad de México, conoció el críquet y representó a México en una Copa Sudamericana y un Centroamericano.

“En el Tec conocí el futbol americano femenino. Me cacharon y me dijeron que si seguía me iban a quitar la beca. Entonces me prometí que saliendo lo iba a practicar, y en 2014 comencé de nuevo y lo jugué”.

En 2017 recibió su primera convocatoria de la selección nacional de futbol americano. Quedó dentro de las 45 jugadoras. Jugó al Mundial en Canadá y quedó en tercer lugar.

Ha practicado también Ultimate Freezbee –interesante deporte, único de juego de conjunto donde no hay árbitro y las jugadas polémicas se dirimen entre las mismas jugadoras–, un poco de crossfit, Footgolf, donde es número 1 en el tour mundial.

En Futbol Tenis participó en una Copa América en Ecuador. También representó a México en Fut 7, como delantera.

Aunque una lesión y operación en la rodilla le han dado un duro golpe en los últimos días, la mexicana continúa pensando en nuevos retos para su vida deportiva.

“El objetivo a corto plazo es dedicarme a recuperarme para el Mundial de 2023 de Footgolf y, en el inter, espero ir descubriendo nuevas cosas deportivas y profesionales que me hagan crecer. Pienso en intentar el canotaje, próximamente”, concluye.

(Con información del portal publimetro.com)