Transforman su imagen súper ‘Ratones Verdes’
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El nuevo escudo del Tri deja atrás al calendario Azteca
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La Federación Mexicana de futbol apuesta por un águila con las alas abiertas
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Cambios para seguir igual o peor
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A la conquista por la identidad de nuevas generaciones
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Pretende ganar más fans rumbo a los dos Mundiales en puerta, considerando a los mexico-americanos en Estados Unidos
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En riesgo, el tricolor, de ir a repechaje rumbo a Qatar 2022
Periodistas Unidos. Ciudad de México. 04 de diciembre de 2021.- Cambios para seguir igual… o peor: los dirigentes han dado un giro en la imagen de los súper Ratones Verdes. Los directivos de la Federación Mexicana de Futbol viven presionados por la feroz persecución debido al grito homófobo y las preocupantes derrotas frente a Estados Unidos y Canadá.
En un semivacío estadio Azteca –para más de 80 mil aficionados, propiedad de Emilio Azcárraga Jean, dueño de Televisa y el club América– montaron todo un espectáculo para mostrar la nueva identidad de la selección mexicana a un año de jugar el Mundial de Qatar, claro, si no se atraviesa un peliagudo problema en las eliminatorias.
Porque está en riesgo de ir a zona de repechaje.
El nuevo escudo muestra a un águila posada sobre un balón y con la otra pata en modo ataque. Las alas están extendidas, en una forma de liberación, a diferencia de los otros escudos. Debajo está la leyenda México en mayúsculas y respetando la tilde.
El revolcón de identidad está bajo el lema de “reconociendo nuestra historia evolucionamos hacia el futuro”. “Evolucionamos hacia un nuevo ciclo, uno en el que más que nunca quepamos todos y todas”.
La develación de la imagen fue visual, sonora y con videos que nombraron conceptos de la cultura mexicana. El estadio Azteca apagó las luces para el show de drones, luces y de bailarines.
El lema se apegó a la pasión, el orgullo y los eternos sueños.
La apuesta por cambiar la identidad de la selección mexicana también tiene como mira el Mundial de 2026 que albergará Estados Unidos, Canadá y México. Los tres países serán los anfitriones de un masivo torneo de 48 países y de 80 partidos. Tres ciudades mexicanas anhelan tener los 10 partidos: la capital del país, Guadalajara y Monterrey.
El cambio del escudo intenta ser más moderno. El primero era muy básico con los tres colores de la bandera mexicana y la palabra México. Para el Mundial de Argentina 1978 se agregó el escudo nacional del águila y la serpiente.
Desde 1986 se utilizó el águila, un sol azteca y un balón. Para el Mundial de Sudáfrica cambiaron algo mínimo, pero significativo: hicieron que el águila levantara la mirada hacia lo alto.
Las polémicas han rodeado a la selección desde las trincheras conservadoras. En 2010, el Tri innovó al vestir de visitante con una camiseta negra. Se cuestionó la falta de identidad con los colores nacionales, sin embargo, fue un éxito de ventas. Eso provocó que los años siguientes se tuviera una camiseta negra.
En 2021 se apostó por una camiseta negra con rosa mexicano, para lucir uno de los tonos más característicos del país, pero fue criticada por desplazar al eterno verde que volverá para la Copa del Mundo.
Según el diario El Economista, cambios en los colores o logotipos del equipo nacional se tienen registrados desde la Copa Mundial de Uruguay en 1930. Se ha aprendido y desaprendido que el tricolor (verde, blanco y rojo) es la base de la identidad visual con un ingrediente cada vez más necesario: la lucha por captar a las nuevas generaciones de mexicoamericanos en Estados Unidos que han atestiguado el crecimiento del conjunto de las barras y las estrellas en la región de Con-caca-f.
¿Debe empatar el rebranding –cambio de marca– con los resultados en la cancha? pregunta el diario El Economista.
Responde Alberto Lati, periodista deportivo y escritor mexicano:
“Eso es lo que ha pasado cuando se pretende relanzar la identidad gráfica de la Selección. Actualmente estamos en ese trance, una Selección que no ilusiona, no saca resultados y eso repercute. Cuando estemos cerca del Mundial de Qatar la efervescencia será como en cada Copa del Mundo. Es como un borrón y cuenta nueva. Un cambio de piel y de era. Todo dependerá después de lo que se entregue en la cancha”.
En el escudo de la Federación Mexicana de Futbol se ha cambiado de postura el águila, en el nuevo diseño le extienden las alas. Pero en el 2010, Justino Compeán entonces presidente de la Femexfut explicaba que el águila no debía apuntar con el pico hacia abajo pues “ningún mexicano se debe agachar. Por eso debe levantar el pico”.
En el Mundial de Sudáfrica el cambio también fue con el jersey, al usarse en negro como primer uniforme. México cayó en octavos de final ante Argentina.
Para el Mundial de Brasil del 2014, que será recordado por el #noerapenal, se regresó al verde como jersey principal, y el segundo color fue un rojo con un zigzagueo que fue comparado, son sorna, con la playera de la caricatura Charly Brown.
En Rusia 2018, los colores de los uniformes regresaron al verde y blanco.
Pero, para el proceso rumbo a Qatar 2022, se optó por un negro con rosa mexicano.
“Era necesario hacer un rebranding eso pensando en el logotipo, pero sobre el uniforme, no me imagino a Brasil con un gris o que a Holanda se le olvide el naranja o a Italia el azul saboya. Verde es el color de una identidad nacional y el águila es la cosmogonía de la fundación de la nación”, subraya Lati.
Interroga el mencionado periódico:
¿Y qué ocurre con los mexicoamericanos? ¿Cómo no perder las generaciones de fans que ven el desarrollo del futbol estadounidense varonil?
Responde:
La Femexfut y Soccer United Marketing (SUM) han aplicado campañas como “Somos Locales” para atender a los más de 60 millones de fans de los Ratones Verdes en Estados Unidos, de los cuales en la última década acompañan al equipo un promedio de 60,000 fans por partido en la gira MexTour.
Sin embargo, en el último año los resultados deportivos ante EU han arrastrado tres derrotas para el Tricolor, dos de ellas finales, la Liga de Naciones y la Copa Oro.
“Atraer a los mexico-estadounidenses que económicamente son relevantes. Si se crea un producto vistoso y se juega bien, se compromete el corazón de millones de descendientes de mexicanos que van a tener el nivel adquisitivo para el modelo de negocio. Conforme haya otra generación de migrantes la lucha entre selecciones es ver quién se los queda”, concluyó Lati.
(Con información del diario El Economista y el portal Infobae.com)