Zarazúa vuelve a poner a México en el mapa de Roland Garros
Foto: @WTA
Por Luis Miguel Pascual
EFE. París, Francia. 28 de septiembre de 2020.- En Roland Garros se vuelve a hablar de tenis mexicano gracias a la tenista Renata Zarazúa, que tras su histórica clasificación para el cuadro grande a través de la fase previa se convirtió en la primera jugadora que gana un partido en lo que va de siglo.
Desde 2000 ninguna tenista mexicana había ganado un partido en un cuadro final de un Grand Slam. La última en hacerlo había sido Angelica Gavaldón en el Abierto de Australia de ese año.
Y su aparición no pasó inadvertida, ya que la pupila del argentino Hugo Armando, también entrenada por su hermano, se convirtió en un torbellino que pasó por encima a la francesa Elsa Jacquemot, una tenista de 17 años, invitada por la organización que jugaba su primer partido profesional y que se inclinó por 6-1 y 6-2 en una hora y 4 minutos.
«Estoy viviendo un sueño, creo que esto es el fruto de muchos años de trabajo», dijo la jugadora afincada en Florida.
Con esta victoria, Zarazúa se asegura estar en el torneo el próximo miércoles, cuando cumplirá los 23 años y cuando debe medirse con la ucraniana Elina Svitolina, cabeza de serie número 3, que venció a la rusa Varvara Gracheva por 7-6(2) y 6-4.
CUARTA MEXICANA
Es la cuarta tenista mexicana que logra entrar en el cuadro final de un Grand Slam, siguiendo los pasos de Gavaldón, Elena Subirats y Patricia Montano, desde que existe la era Open a mediados de los 60.
La pionera había sido Yola Ramírez, que en 1960 y 1961 llegó a la final de Roland Garros.
Además, es la primera deportista, de ambos sexos, en el cuadro final de un Grand Slam desde que en 2007 Bruno Echegaray disputó el Abierto de Estados Unidos.
Zarazúa, que nació en Ciudad de México el 30 de septiembre de 1997, ocupa en la actualidad el puesto 178 del ránking mundial.
Nada más acabar su partido, Zarazúa descolgó su teléfono para hablar con su entrenador. «Hay cosas que quiero contarle enseguida, sensaciones, porque luego ya no es lo mismo», aseguró.
Para la mexicana, su histórico triunfo tiene una gran significación en lo personal, pero también en el impulso que puede darle al tenis en su país.
«Me siento muy contenta por unirme a la historia, juego para mejorarme a mi, no para hacer historia, pero esto viene como un plus. Amo a México y me encanta que la gente de México me apoye. Allí he crecido y estoy muy contenta por motivar a la gente mexicana, donde el fútbol es muy importante y espero que ahora también lo sea el tenis», dijo.
TRIUNFO DE EQUIPO
«Esta victoria significa mucho. Las mexicanas no habíamos tenido un gran salto, no es que fuera para deprimirse, pero en México no nos tenían tan a la vista. Esto me da gusto para que nos puedan apoyar más, para que estén más motivadas en México las tenistas júnior. Estoy más contenta que por hacer historia o por salir en las noticias, porque estoy trabajando desde chiquitita y no había tenido los resultados que merecía», aseguró.
La jugadora atribuyó el cambio en su juego a una mejor preparación, más adaptada y humana.
«Siempre he sido una jugadora que me gusta entrenar muchísimo, pero no lo estaba haciendo de la forma correcta. Desde que mi hermano y Hugo Armando tomaron cargo de mi tenis, me dijeron lo que tenía que hacer, que no me servía de nada entrenar ocho horas, tenía que hacerlo con una meta. Me pusieron mis ideas en lo correcto. Lo que más me ha ayudado es tener al equipo correcto, que me quieren como persona», señaló.