Autoridad electoral de Brasil pide explicaciones a la Policía por retenes
EFE. Sao Paulo, Brasil. 30 de octubre de 2022.- El Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil ordenó a la Policía Federal que aclare si sus operaciones realizadas este domingo pueden interferir en las elecciones presidenciales.
En concreto, el presidente del TSE, el magistrado Alexandre de Moraes, dictó una resolución que exige a la Policía Federal aclarar si las operaciones llevadas a cabo por este organismo tienen algún impacto en los sistemas de datos del Centro Integrado de Comando y Control Nacional.
De Moraes también prohibió a la Policía Federal divulgar informaciones sobre las operaciones que desarrolle este domingo, para evitar que estas informaciones puedan influir en la votación, según un comunicado del TSE.
Además, prohibió a la Policía Federal de Carreteras realizar cualquier operación que pueda dificultar el transporte de electores.
La autoridad electoral aclaró que la orden no se aplica para las operaciones de la Policía Federal destinadas a prevenir o reprimir delitos electorales.
La orden del TSE se dictó a raíz de una denuncia presentada por un diputado de izquierdas, que afirmó que existe una «instrumentalización» de la Policía Federal y de la Policía Federal de Carreteras «dirigida a eventualmente interferir en el proceso electoral».
Según el diputado Paulo Teixeira, estos organismos controlados por el Gobierno brasileño pretenden «crear hechos políticos artificiales en beneficio de la candidatura a la reelección» del presidente Jair Bolsonaro y en detrimento de su adversario, Luiz Inácio Lula da Silva.
Tras votar en Sao Paulo, De Moraes no se refirió a la resolución en la que pidió explicaciones a la Policía Federal, pero hizo un llamamiento a los brasileños para que acudan a las urnas «para acabar con esas noticias delictivas de que hay fraude en las urnas».
El presidente ultraderechista, Jair Bolsonaro, y sus partidarios han sembrado dudas acerca de la fiabilidad de las urnas electrónicas que se usan en Brasil desde 1996 sin que nunca se hayan registrado denuncias de fraude.
En la primera vuelta de las elecciones, Lula, abanderado de un amplio frente progresista al que se han sumado fuerzas de centro y centroderecha, fue el candidato más votado con el 48,4 % de los votos, frente al 43,2 % que obtuvo el capitán retirado del Ejército, que aspira a un nuevo mandato de cuatro años.