6to Festival Arte Para No Olvidarte + Video

Periodistas Unidos. Ciudad de México. 03 de agosto de 2021.- Hoy, 31 de julio de 2021, nos volvemos a reunir aquí, en la calle luz Saviñon, afuera del edificio 1909 para seguir contando los años y hacer visible hasta cuándo las ejecuciones de Alejandra, Mile, Nadia, Rubén y Yessenia seguirán impunes y sin respuesta por parte de las autoridades.

Recordamos que desde el primer momento en los medios de comunicación hubo filtraciones por parte de la Procuraduría General de Justicia, la criminalización hacia las víctimas, la xenofobia y el terrible discurso que manejaron en 2015, y a lo largo del tiempo, quienes quisieron imponer su propia verdad histórica del caso Narvarte. Seguimos aquí para decirles no, no es así, y junto a sus familias, amigas y amigos, conocerles, saber quiénes fueron ellas y él, cuáles sus intereses, cuáles sus sueños.

Salir a las calles para abrazarnos y organizarnos es nuestra forma de mirar de frente el mensaje de horror que quisieron imponer con las ejecuciones de Alejandra, Mile, Nadia, Rubén y Yesenia. Tomamos como impulso las primeras acciones de protesta realizadas aquí, afuera del departamento, convocadas por distintas colectivas feministas en agosto del 2015, pocos días después del crimen.

En 2016, nos convocó la intención de Mirtha Luz (madre de Nadia) de hacer un ritual frente al departamento. Siendo tan grande el impacto, y con tantas personas que se sentían afectadas, se comenzó a organizar lo que se convertiría en el primer Festival de Arte para no olvidarte junto a las familias, organizaciones de periodistas, de derechos humanos, colectivas y otras personas solidarias que se fueron sumando.

A lo largo de estos años, el festival ha apostado por mantener la memoria viva, convocar, invitar y crear un espacio de exigencia junto a las familias, donde se escuchen todas las voces. Lo que inició como una acción por recuperar los espacios que caminamos, se convirtió en una red de apoyo mutuo que nos sostiene y sobrepasa una fecha específica.

Gracias a las familias y su insistencia, por no dejar los espacios y tomar los micrófonos, se logró cambiar la “verdad oficial”. Esa insistencia ha sido una gran lección de fuerza, de vida y de posibilidad. Partimos de esa importancia de generar nuestras propias formas de organización y memoria colectiva, de significados compartidos. Generamos nuestros propios espacios para encontrarnos, para recordarles y exigir justicia; lugares donde podamos preguntarnos cómo sanar.

Insistimos en recuperar la calle, con la fuerza de su recuerdo. Habitamos esta calle para hacer una fiesta y una protesta. Es importante seguir encontrándonos y nombrarles aquí, no abandonarles. No dejarlas solas, no dejarlo solo. El edificio 1909 de la calle Luz Saviñón se ha convertido en un memorial vivo.

Por el derecho a la verdad y el respeto a la memoria.

Desde entonces, es un espacio de reunión en el que coincidimos quienes llevamos en nuestro propio cuerpo la exigencia de justicia. Cada día convertimos esa rabia y dolor en abrazos, encuentros y acompañamiento a las familias y a su exigencia de justicia.

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.

Easysoftonic