El poder femenino de «Nomadland» hace historia en los Óscar de la pandemia
Por David Villafranca
EFE. Los Ángeles, Estados Unidos. 25 de abril de 2021.- «Nomadland» confirmó su aura de favorita y triunfó en los Óscar de la pandemia, donde esta poética reflexión sobre la crisis del capitalismo se llevó el premio de mejor película y con la que hicieron historia su directora, la china Chloé Zhao, y su protagonista, Frances McDormand.
Zhao se convirtió en la segunda mujer en 93 ediciones de los Óscar en ganar el galardón a la mejor dirección, un hito que antes solo había logrado Kathryn Bigelow con «En tierra hostil» (2008).
Por su parte, McDormand se anotó su tercera estatuilla como mejor actriz tras «Fargo» (1996) y «Tres anuncios en las afueras» (2017), algo que antes solo habían conseguido leyendas como Meryl Streep, Ingrid Bergman (tres Óscar cada una) y Katharine Hepburn (cuatro premios en total).
«Nomadland» había pasado como un ciclón por esta extraña temporada de premios de Hollywood que la pandemia puso patas arriba. Y en su gran noche, no falló.
«Siempre he encontrado bondad en la gente que he conocido, en cada lugar al que he ido en el mundo», aseguró Zhao.
«Así que esto es para todo el que ha tenido la fe y el coraje de aferrarse a la bondad en sí mismo y en los demás», añadió.
Con su reconocimiento a mejor dirección, Zhao extendió una magnífica racha internacional de este Óscar que en los últimos diez años solo ha tenido un ganador estadounidense: Damien Chazelle por «La La Land» (2016).
Por su parte, McDormand no solo triunfó como mejor actriz, que era uno de los galardones más inciertos de la noche, sino que también se llevó la distinción de mejor película de «Nomadland» como productora de la cinta.
Tras alcanzar el galardón más cotizado de los Óscar, McDormand hizo una gran defensa de la magia del cine y pidió al público que vean «Nomadland» y el resto de nominadas «en la pantalla más grande posible».
HOPKINS Y EL PODER DEL VETERANO
Parecía que el desaparecido Chadwick Boseman iba a tener una despedida solemne en los Óscar con un premio póstumo al mejor actor por «la madre del blues», pero Anthony Hopkins terminó ganando este galardón por su magnífico retrato de la demencia en «El padre».
Hopkins, que no participó en la gala, logró así su segundo Óscar tras «El silencio de los corderos» (1991) y se convirtió con 83 años en el actor de mayor edad en ser reconocido por la Academia de Hollywood.
El poder de la veteranía también se dejó notar en el Óscar a la mejor actriz de reparto, que fue para la maravillosa Yuh-Jung Youn, por «Minari».
Su discurso fue de lo más espontáneo de una gala emotiva e íntima pero también encorsetada y falta de chispa. La surcoreana flirteó con Brad Pitt, que le había entregado el Óscar; perdonó a todo el mundo por pronunciar mal su nombre, y aseguró que competir entre intérpretes no tiene sentido porque cada película es un mundo diferente.
Glenn Close, también nominada en esta categoría, empató con Peter O’Toole en un récord que nadie quiere conseguir: el de mayor número de candidaturas (8 en total) sin premio.
Además, Daniel Kaluuya se coronó como mejor actor de reparto por la radical y muy política «Judas y el mesías negro».
ESPAÑA Y MÉXICO CANTAN VICTORIA
Dos de las bazas hispanas en los Óscar se fueron con una sonrisa en la cara.
Por una parte, el español Sergio López-Rivera logró el Óscar a mejor maquillaje y peluquería por «La madre del blues».
También México pudo cantar victoria gracias al sonido de «Sound of Metal», donde figuraban como nominados Jaime Baksht, Michelle Couttolenc y Carlos Cortés.
Peor suerte corrieron otros candidatos hispanos, como la sensación chilena «El agente topo», que optaba al Óscar a mejor documental; o el español Santiago Colomo, que no pudo conseguir el premio de mejores efectos visuales por «El magnífico Iván».
LÁGRIMAS DE VINTERBERG Y FRACASO DE SORKIN
Thomas Vinterberg regaló a Dinamarca el Óscar a la mejor cinta internacional con la excepcional «Otra ronda» y recordó a su hija Ida, que murió en un accidente días antes de comenzar el rodaje de esta película que iba a suponer su debut como actriz.
«Ida, este es un milagro que acaba de suceder y tú eres parte de este milagro», dijo Vinterberg entre lágrimas.
Por otra parte, «Soul» hizo buenos los pronósticos con el Óscar a la mejor película de animación mientras que «Lo que el pulpo me enseñó» derrotó a documentales de gran nivel como la rumana «Collective» o la ya mencionada «El agente topo».
Dos guionistas triunfaron a lo grande con sus primeros trabajos para el cine.
La ópera prima de Emerald Fennell, «Una joven prometedora», se llevó el Óscar a mejor guion original, mientras que Florian Zeller consiguió el galardón de mejor guion adaptado con su debut en la gran pantalla, «El padre».
Los Óscar de la pandemia también resultaron ser una ceremonia de alegrías para casi todos, ya que detrás del triplete «Nomadland» se situó un gran pelotón de seis películas con dos premios por cabeza: «El padre», «La madre del blues», «Judas y el mesías negro», «Soul», «Sound of Metal» y «Mank».
Pero el gran fracaso de la noche fue para Aaron Sorkin: su reivindicativa «El juicio de los 7 de Chicago» se presentó en la ceremonia con seis candidaturas y al final se fue de vacío.