El sabor de Malinalco está en Casa Colibrí

Por Sandra Márquez

Periodistas Unidos. Ciudad de México, a 29 de mayo de 2022.– Cuando se inicia una travesía en alguna latitud de nuestro interés, lo importante es tener la energía necesaria para disfrutar cada paso, cada descubrimiento, y qué mejor forma de hacerlo que con la barriga llena y el corazón contento.

Si tu próximo destino es Malinalco en el Estado de México, te invitamos a experimentar la tradición, sabor y sazón que se fusionan en la propuesta culinaria de Casa Colibrí, un restaurante imperdible en el corazón de este Pueblo Mágico.

Casa Colibrí cuenta con jardín, balcón y terraza, desde ésta última los comensales pueden vislumbrar la Plaza Principal, la Parroquia del Divino Salvador, el Convento de la Transfiguración y la zona arqueológica en la cumbre del Cerro de los Ídolos, donde los mexicas realizaban ceremonias de iniciación para guerreros águila y jaguar.

Para los viajeros y residentes Casa Colibrí ofrece diversas y suculentas opciones de platillos para todo gusto. Además cuenta con una carta de destilados que incluye mezcales de la región, así como tragos inspirados en hermosos y coloridos colibríes, como el cocktail Hada (mezcal, hierbabuena y guayaba).

#SazóndePueblo

Este restaurante, considerado como un templo de la gastronomía tradicional mexicana, se ubica en la esquina más concurrida, justo donde convergen la Plaza Principal y Vicente Guerrero. 

Entre las delicias que preparan cocineras y cocineros están: Lasaña de tortilla, tamal de cochinita pibil, pizza de hongos, fetuccini a la milpa, molletes de cecina, sopes prehispánicos (cecina y chapulines), taquitos de huevo bañados en salsa de frijol, sopa de tortilla, tlayudas, bolitas de plátano y sopas.

Sin embargo, si lo que el comensal busca es una experiencia diferente, entonces la opción es el jabalí, que es cocinado magistralmente para ser enviado a la mesa en tacos, a la hawaiana o en forma de salvajes y jugosas costillas. Eso sí, para este y otros platillos debes tener paciencia ya que todo requiere su tiempo de cocción.

Los visitantes no sólo encuentran comida deliciosa en vastas porciones, también reciben atención por parte del personal, quienes los reciben como en casa, con una sonrisa y con la disposición para hacer de su experiencia un momento inolvidable.

Ubicado a menos de dos horas de la Ciudad de México, el restaurante cobra vida en una bien cuidada casona de principios del año 1900. Destaca su salón de paredes de adobe así como un mural que invita a conocer las ocho diferentes especies de colibríes que viven en Malinalco, y que con suerte podrías observar mientras disfrutas de una comida excepcional.

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