Crónica del “Foro consulta” Fonca: Gobierno Federal reprobado en cultura
Foto: Rita Alarcón
Por Rita Alarcón
Periodistas Unidos. Ciudad de México 08 de marzo de 2019. Por unanimidad a mano levantada en un asambleísmo se ha establecido como una primera “Mesa de trabajo” para los trabajos que reformarán el Fonca el próximo 22 de marzo en el mismo patio Octavio Paz de la Biblioteca México al que se citó a un “Foro Consulta con la comunidad artística”.
Me incorporé a la discusión, un amigo me informó que no era tal, que sólo se estaban haciendo ronda de preguntas y respuestas al estilo de la conferencia de prensa matutina del ahora presidente. Mi sorpresa fue absoluta cuando al mirar al pódium de funcionarios no divise la figura de Mario Bellatin, pues esperaba que la autoridad competente estuviera ahí para una escucha. El colmo fue cuando después de la intervención de la poeta María Rivera mencionó que no fue un foro de consulta y solo se auditó la demagogia, nos preguntamos porque Mario no estaba.
Lejos de lo ofensivo, su ausencia, me pareció que se burlaban de mí, de mi tiempo y de mi presencia por lo que acompañé al colectivo que abandonó la sala en medio de gritos “Consulta verdadera” que en el streaming de redes sociales fue censurado al calce del viejo sistema priísta de Enrique Peña Nieto.
Volví para ver cómo los funcionarios tenían cara de costal de papa recibiendo golpes. Ni siquiera intentaban esquivarlos, sólo recibían y daban la palabra, ni siquiera como trámite si no como un ruido que no tenía nada que ver.
Entre los ruidos la idea de que al Fonca se mantenga abierto como Oxxo 24/7 y que yo proponga me confunde, no sólo el discurso sino la idea de un comité permanente de evaluación, una suerte de confesor-mecenas que estará dispuesto a ver qué tanto necesito para realizar mi muy particular proyecto creativo, supongo que algo que tendrá un tiempo mínimo y máximo de respuesta.
Asistí en la esperanza de escuchar las reglas de operación, apegadas a la legislación vigente, transparentes y públicas de las próximas convocatorias y como respuesta me llevé las grandes ideas que no pueden expresarse por escrito pues son tan geniales que siguen en elaboración y ahora se someterán a mesas de trabajo con la comunidad, que dicho sea de paso incluye desde estatuas vivientes hasta miembros del sistema nacional de creadores pasando por los muy peregrinos perfiles de colectivos comunitarios.
Nos dilapidaron de privilegiados y que no todo era la Condesa, una acusación que encarna violencia institucional, pues ahora resulta que si vivo en la Condesa (lugar donde por cierto vive nuestro director del Fondo de Cultura Económica) soy un ser “privilegiado” si tengo una “beca” “soy privilegiado” y entonces pues soy por ello un enemigo del “sistema de poder imperante”. Poder que en los brazos de la cultura es un antónimo de la creación.