Ciudad de México instala 26 puntos de pruebas covid para doblar su capacidad
Foto: Cuartoscuro
EFE. Ciudad de México. 20 de noviembre de 2020.- El Gobierno de Ciudad de México instaló este viernes 26 módulos para hacer pruebas rápidas de covid-19 y PCR en puntos de gran afluencia como estaciones de metro, con el objetivo de doblar su capacidad de detección hasta los 10.000 tests diarios.
Las nuevas zonas de pruebas, completamente gratuitas, se añaden a los 117 centros de salud que ya las hacían y a las carpas instaladas en cada una de las 158 colonias (barrios) consideradas de atención prioritaria por la incidencia del virus.
La jefa de Gobierno de la ciudad, Claudia Sheinbaum, reconoció este viernes que el objetivo es «duplicar el número de pruebas» ante una situación «límite» de contagios y hospitalizaciones en la capital, que podría conducir a una saturación hospitalaria a finales de diciembre.
Las declaraciones de la jefa de Gobierno ocurrieron un día después de que México superara las 100.000 muertes por covid-19, de las que la capital del país representa el 16 %, además del millón de contagios nacionales rebasados la semana pasada.
Una de esas zonas de gran afluencia es el Metro Etiopía, situado en el corazón capitalino, donde Cecilia fue una de las primeras personas en hacerse la prueba en este nuevo «macroquiosco» con capacidad para 150 tests diarios.
«Me pareció muy fiable esta prueba que están haciendo», explicó a Efe con el resultado de su prueba rápida ya en la mano, 20 minutos después de que un trabajador sanitario le tomara sus muestras.
Cecilia agradeció poder hacerse la prueba de manera gratuita y quedarse así «muy tranquila», después de haber consultado en centros privados donde le costaba 900 pesos (unos 45 dólares).
La doctora Mónica Ramírez, directora de la jurisdicción sanitaria Benito Juárez, donde se encuentra el Metro Etiopía, explicó que el primer paso del procedimiento en estos quioscos es hacer un estudio de caso de cada paciente, que es «lo que lleva más tiempo».
«En el estudio de caso los médicos que están tomando los datos valoran al paciente para saber si requiere directamente una prueba de PCR o se le hace una prueba rápida», precisó, ya que las personas con síntomas leves suelen pasar un test rápido y los pacientes con cuadros moderados o más graves son sometidos a una PCR.
Los planes de Ciudad de México contemplan que el 70 % de sus 10.000 pruebas diarias sean rápidas o de antígenos y solo el 30 % PCR, pues el resultado de la primera tarda unos 20 minutos y el de la segunda se demora, indicó Martínez, «en promedio de cinco a siete días, porque se manda al laboratorio».
Luis Alfonso Moreno, mensajero que pasa todo el día en la calle y en el transporte público, tampoco precisó de una PCR, así que en un tiempo «relámpago» conoció que no alberga el SARS-CoV-2 en su organismo pese a su miedo e «incertidumbre».
«Yo viajo en el metro y entra la gente y se quita el cubrebocas. Entonces, dónde está el chiste», reclamó a los mexicanos, que bajo su opinión no se están cuidando como deberían.
«Si se están preocupando por nosotros (con las pruebas), creo que lo mínimo que debemos hacer es corresponder también y preocuparnos por nosotros mismos», consideró con el papel que acreditaba su negativo entre las manos.