Enfrentamiento en Topilejo deja 4 policías heridos
El gran operativo, que conllevó el despliegue de unos 150 policías, elementos de la Guardia Nacional y del ejército, camiones blindados y helicópteros en la carretera de salida de la capital por el sur, logró desarticular una célula del crimen organizado de un grupo aparentemente procedente de Sinaloa, así como todo un arsenal de armas de alto calibre.
Según García Harfuch, su principal objetivo era la venta de drogas y “generar violencia”.
La acción estuvo motivada por varias denuncias ciudadanas que habían reportado gente armada desde hace dos meses en esa zona que conecta la capital con Cuernavaca, en el estado de Morelos, y con el puerto de Acapulco, en Guerrero.
Según indicó el jefe de la policía capitalina, en la operación se liberó a cuatro personas que estaban retenidas en la casa de seguridad, una de las cuales llevaba 20 días capturada. Las autoridades no descartan que pueda tratarse de integrantes de algún grupo rival.
En la casa fueron aseguradas diez armas largas — incluido un fusil Barrett calibre .50 y una ametralladora— tres armas cortas, 12 granadas, chalecos balísticos, cargadores y droga.
García Harfuch indicó que los presuntos delincuentes “abrieron fuego en diferentes ocasiones” pero que ninguno de los tres helicópteros que participaban en el operativo fue impactado.
La intensa balacera, que fue grabada en videos divulgados en redes, puede ser algo habitual en otros puntos de México pero no suele ocurrir en la capital. No obstante, el funcionario reconoció que “siempre ha habido grupos de la delincuencia organizada en Ciudad de México” y que el trabajo de las fuerzas de seguridad es combatirlos y evitar que se expandan.
En este sentido, agradeció la participación ciudadana, “que cada vez está denunciando más con nosotros”
Uno de los peores ataques ocurridos recientemente en Ciudad de México fue hace dos años, en junio de 2020, cuando un comando del cártel de Jalisco Nueva Generación intentó asesinar a García Harfuch.
Al amanecer y en una de las principales avenidas de una zona acomodada del oeste de la capital, más de una decena de hombres llevaron a cabo un plan cuidadosamente coordinado para atacar el vehículo blindado del jefe policial con granadas, armas semiautomáticos y un fusil calibre .50.
García Harfuch recibió tres disparos y fue sometido a cirugía. Dos de sus escoltas y una mujer que pasaba en un vehículo por el lugar murieron.