Jóvenes capitalinos desprotegidos ante la violencia
Foto: Alejandro Meléndez
Por Mariángel Calderón
Notimex. Ciudad de México. 09 de mayo de 2019.- La vida de los adolescentes mexicanos tiene poca valía. Ante el asesinato de la estudiante Aideé Mendoza, colectivos y padres de familia se reunieron con orden, pero también con dolor, para exigir justicia por la violencia a la que están expuestos los jóvenes del país.
El abogado del Colectivo Aequus, Promoción y Defensa de Derechos Humanos, Víctor Caballero, explicó que la reunión de este jueves frente a la Procuraduría de Justicia de la Ciudad de México tiene como fin apoyar a la familia de Aideé Mendoza, aunque también a familiares de jóvenes desaparecidos.
En entrevista, Caballero dijo que tan solo esta semana se tienen documentadas seis desapariciones de estudiantes; uno de la facultad de Contaduría, dos del CCH Oriente, Mariela Díaz Valverde de la Facultad de Filosofía y Letras, y otra del Instituto de Educación Media Superior (IEMS).
Sin embargo, en el colectivo se cuenta con un registro de 22 personas desaparecidas; en ese sentido, expuso que de abril del año pasado a la fecha la cifra es de 60 desapariciones, de las cuales 30 han aparecido con vida, 10 fueron encontradas muertas y el resto sigue sin ser halladas.
Lo que buscamos con la reunión es «verdad y justicia, que no estén haciendo ideas fantásticas de la Procuraduría, que cesen la filtraciones y que las autoridades universitarias asuman su responsabilidad en estos casos».
En ese sentido, hizo referencia a la pluma bala (arma que habrían usado en el homicidio de Aideé) y a las declaraciones de los estudiantes del CCH Oriente y otras personas vinculadas a la investigación, versiones que además, dijo, no tuvieron sustento y que luego la Procuraduría fue cambiando, lo que obstaculiza el conocimiento de la verdad.
El activista recalcó que en ese caso las autoridades universitarias debieron haber respondido de manera inmediata, debido a que hay versiones sustentadas que señalan que la joven estuvo, alrededor de una hora después del delito, en el servicio médico del plantel educativo, aunado a que se desconoce si se llamó de manera inmediata a los servicios de emergencia.
«El problema que tenemos con las autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) es que cada vez que tenemos este tipo de casos buscan la forma de administrar la información para que no trascienda y no sé generen movilizaciones en la comunidad estudiantil».
«Hasta los tenis le robaron» Víctor es papá de José Víctor, un adolescente de 16 años arrollado por un conductor en estado de ebriedad en un paradero de autobuses en el sur de la capital mexicana, “después de muerto le robaron todas sus pertenencias, hasta los tenis se llevaron los hijos de la …..”. El muchacho era estudiante del CCH plantel Sur.
A la fecha, tras cuatro años de aquello, aún no hay justicia, pero sí muchas irregularidades para esclarecer los hechos. De entrada, la persona que atropelló a Víctor fue cambiada de lugar en el momento de los hechos, el cambio de la edad de su hijo, de 16 a 30 años.
Desde aquello, Víctor no ha tenido acercamiento con las autoridades universitarias y aún cuando el muchacho contaba con seguro de vida escolar, ante las irregularidades asentadas en las carpetas de investigación, no ha podido hacer valer las garantías de esta póliza.
“Cuáles son los derechos de un menor de edad para poder estar vivo, quién defiende a un menos de edad, no hay una autoridad que defienda a un menor de edad, todo el mundo se da la vuelta, a nadie le importa que muera en un niño, a nadie le importa”, dijo con la voz quebrada.