Jóvenes en lucha: el papel crucial de la juventud en un mundo en crisis
Por Florentino López Martínez
Periodistas Unidos. Ciudad de México. 23 de agosto de 2024.- El retorno a las aulas de las escuelas de educación media superior y superior, la celebración del Día Internacional de la Juventud el 12 de agosto, y la realización de un campamento juvenil en República Dominicana, nos invita a reflexionar sobre la situación y el rol de los jóvenes en el mundo y en nuestro país.
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el mundo hay 1,200 millones de jóvenes entre 15 y 24 años, de los cuales casi 245 millones son ninis, es decir, no trabajan ni estudian. A pesar de que 65 millones de ellos buscaron empleo en la primera mitad de este año, muchos no lograron encontrarlo.
Este panorama es aún más catastrófico para las mujeres jóvenes, quienes tienen el doble de probabilidades de ser ninis en comparación con los hombres. En América Latina, la tasa de desempleo juvenil es el doble que el promedio mundial, que en 2023 fue del 6.3%, alcanzando hasta un 30% en algunos países, según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
El panorama de los jóvenes en México
En México, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en el marco del Día Internacional de la Juventud 2024, publicó datos que indican que hay 31 millones de jóvenes de 15 a 29 años, lo que representa el 23.8% del total de la población mexicana.
De estos, 15.9 millones son trabajadores precarios con un nivel de escolaridad que no supera el bachillerato; sólo el 7% recibe más de dos salarios mínimos, y apenas 2 de cada 100 logran terminar la educación superior.
La juventud, víctima de las crisis globales
Estos datos nos ofrecen apenas una vista panorámica de la situación actual. En las crisis económicas, políticas y sociales que el mundo enfrenta hoy, la juventud es una de las principales víctimas. En conflictos como la guerra en Ucrania, son los jóvenes los que se utilizan como carne de cañón en ambos bandos. Las universidades y escuelas, a menudo, son las más afectadas por los recortes presupuestales recomendados por organismos internacionales.
Emigración, narcotráfico y desapariciones: retos para los jóvenes mexicanos
Aunque los datos en México parecen más favorables, millones de jóvenes viven en emigración forzada debido a la pobreza y la marginación. Además, muchos jóvenes forman parte de los ejércitos del narcotráfico, evidenciando que la juventud es una de las principales víctimas de la violencia y el crimen organizado.
El panorama se vuelve aún más terrorífico al abordar el tema de los desaparecidos. De los cerca de 115 mil desaparecidos en México, más de 44 mil son jóvenes entre 15 y 29 años, lo que representa el mayor grupo por edad entre los desaparecidos.
La juventud retoma la lucha social
Esta realidad ha obligado a los jóvenes a retomar la lucha social, aunque sea con distintas banderas, demandas y necesidades. Ejemplos de esto incluyen el gran levantamiento de estudiantes en Estados Unidos contra el genocidio palestino y las luchas al interior de las universidades por mejores condiciones de estudio.
El gobierno mexicano presume del crecimiento del empleo juvenil, sin embargo, estos empleos son altamente precarios, sin seguridad social ni derechos laborales. Las nuevas modalidades de empleo que combinan plataformas digitales e inteligencia artificial deberían mejorar la vida de los trabajadores, pero en muchos casos solo incrementan la explotación juvenil.
La Juventud como motor de cambio
Desde hace más de cuatro décadas, distintas organizaciones juveniles se reúnen cada dos años para discutir el papel de los jóvenes en la lucha de la clase obrera y los pueblos frente a los grandes problemas mundiales. Este año, del 18 al 25 de agosto, jóvenes de diversos países como Turquía, Francia, Alemania, España, Estados Unidos, Brasil, Ecuador, Puerto Rico, Haití, República Dominicana y México, participan en el XXVIII Campamento Internacional de la Juventud Democrática, Antifascista y Antiimperialista bajo el lema: «Juventud unida por la paz y el futuro contra el imperialismo y su guerra».
Sin duda, muchos jóvenes esperan tareas concretas y orientaciones de este campamento que les permitan organizarse y continuar luchando por un mundo mejor, uniendo su lucha con las luchas proletarias y populares que siguen creciendo en todo el planeta. En las luchas de los jóvenes también se abren los senderos de nuestra lucha de clases.