La globalización tiene su origen en la conquista de América, sostiene experta
EFE. Ciudad de México. 05 de junio de 2019.- La conquista europea de América posibilitó una interconexión económica entre continentes en la que tiene sus raíces la globalización, sostuvo este martes la historiadora Pilar Martínez López-Cano, investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
«La conquista de América posibilitó y multiplicó la interacción y la conexión económica de cuatro áreas densamente pobladas de cuatro continentes: Europa, Asia, África y América», señaló la licenciada en Geografía e Historia por la Universidad Complutense de Madrid.
Al impartir la conferencia «Las repercusiones económicas de la Conquista», la también maestra y doctora en historia por la UNAM indicó que, de acuerdo con diversos autores, «en esta interacción podemos ver los orígenes de la globalización actual».
Reconoció que esta interpretación no está exenta de polémica, pues muchos historiadores y economistas situarían el origen de la economía global en el siglo XIX «a raíz de la convergencia de precios que se empieza a observar en distintos productos en varios continentes, y de la integración de mercados».
No obstante, destacó que Europa, Asia y África habían mantenido contactos e intercambios mercantiles desde la antigüedad, incluso antes de la llegada a América de la expedición de Cristóbal Colón en 1492.
Recordó por ejemplo «el peso del norte de África y Egipto como parte sustantiva del Imperio Romano en el comercio con el Mediterráneo, las caravanas que llegaban de Asia por el Levante, cargadas de especias, o las relaciones comerciales de África y Asia a través del Océano Índico».
«Pero faltaba América, una masa continental de más de 40 millones de kilómetros cuadrados, cuatro veces Europa, y con una población que probablemente al momento del contacto podía ser algo inferior a la europea», expuso la especialista en historia económica colonial.
A partir de 1492, sostuvo, América se incorpora a los intercambios en el Viejo Mundo. «El comercio con América tendrá repercusiones en los intercambios que ya mantenían entre sí Europa y Asia», manifestó.
«Al mismo tiempo, va a impactar también en África. Pensemos en el comercio de esclavos. No cabe duda de que el tráfico de esclavos tuvo que marcar la demografía y la economía de amplias regiones de África», apuntó la experta.
Y dentro de América, añadió, la Nueva España «tendrá un papel fundamental al conectarse directamente con Europa vía el Puerto de Veracruz, y desde luego con Manila y Asia a través de Acapulco».
«A través de estas rutas mercantiles que conectan directamente con la Península Ibérica y Filipinas, la Nueva España entrará en contacto directo con plazas de Europa y del extremo oriente, pero también con África, de donde proviene, sobre todo en los siglos XVI y XVII, gran parte de la mano de obra esclava», puntualizó.
La UNAM realiza desde el 20 de marzo y hasta el 12 de junio el ciclo de conferencias «1519. El encuentro de dos mundos» para conmemorar el quinto centenario de la llegada de la flota de Hernán Cortés al continente americano.