Los aranceles a México y Canadá por aluminio y acero serán del 50 %, dice la Casa Blanca
EFE. Ciudad de México. 12 de febrero de 2024.- Los aranceles sobre el aluminio y el acero de México y Canadá podrían alcanzar el 50%, anunció este miércoles la Casa Blanca, en plena guerra comercial con varios países.
El lunes, el presidente Donald Trump anunció aranceles del 25% sobre los dos metales para todos los países, sin excepciones ni exenciones.
Pero sobre México y Canadá ya pesaba un 25% de tarifas impuestas hace unos días sobre todos sus bienes para incitarlos a controlar la inmigración ilegal y el tráfico de fentanilo. Al final, este 25% ha quedado suspendido durante un mes para negociar.
Si los tres países, unidos por el acuerdo comercial de América del Norte (T-MEC), no llegan a un acuerdo, se sumarán los dos 25%, y el acero y el aluminio producidos por México y Canadá serán gravados en total con un 50% a partir del 12 de marzo, precisó la Casa Blanca.
«Seguridad nacional»
El magnate republicano alegó riesgos para la seguridad nacional para gravar los dos metales de forma generalizada. Países como Argentina, México o Brasil, entre otros, que se beneficiaban de exenciones pierden sus privilegios.
Según la Administración de Comercio Internacional de Estados Unidos, desde marzo de 2024 hasta febrero de 2025, Brasil fue el segundo mayor exportador de acero a Estados Unidos con 3,7 millones de toneladas métricas, seguido de México con 2,9 millones.
Según la misma fuente, Argentina, cuyo presidente ultraliberal Javier Milei mantiene una relación cercana con Trump, fue el sexto exportador de aluminio en 2024 a Estados Unidos, con más de 176.000 toneladas.
El gobierno argentino, en declaraciones al diario Clarín, que cita una fuente cercana a Milei, estima que los aranceles no cambian «en lo más mínimo» sus objetivos puesto que seguirá «trabajando en un tratado de libre comercio».
México pidió a Trump «sentido común», uno de los conceptos más manidos del republicano.
«Dice a veces el presidente Trump, ‘sentido común’. Bueno, pues le tomamos la palabra: sentido común, no balazo en el pie, no destruir lo que hemos construido los últimos cuarenta años», declaró el martes el ministro de Economía de México, Marcelo.
«Estados Unidos nos vende más, entonces no se justifica esa tarifa», subrayó el ministro, quien detalló que el país vecino provee «casi 6.897 millones de dólares más» de lo que exporta México, según cifras oficiales estadounidenses de 2024.
Brasil, país que presume de una diplomacia pragmática, también optó por la mesura.
Su ministro de Relaciones Institucionales, Alexandre Padilha, afirmó que su país «no estimula ni entrará en ninguna guerra comercial», pero calificó de «contraproducentes» las «medidas unilaterales».
«Aranceles recíprocos»
La Casa Blanca lo ve con otros ojos. «El presidente Trump sigue tomando medidas audaces para proteger las industrias críticas de acero y aluminio de Estados Unidos», afirmó este miércoles la portavoz Karoline Leavitt en rueda de prensa.
Poco después, el propio Trump declaró a periodistas que podría firmar «hoy o mañana por la mañana» el decreto sobre «aranceles recíprocos».
«El mundo abusa de Estados Unidos desde hace años. Nos imponen aranceles aduaneros masivos cuando nosotros no lo hacemos», insistió el presidente.
Por recíprocos entiende gravar los productos de un país al mismo nivel que este impone a los bienes exportados por Washington.
«Lo hice con el acero y el aluminio, que irá progresivamente hasta el 25%, pero homogeneizará las reglas de juego», añadió el republicano.
Trump impuso el 1 de febrero aranceles aduaneros del 25% a todos los productos procedentes de Canadá y México, a los que acusa de no hacer lo suficiente contra la inmigración ilegal y el tráfico de fentanilo.
Los suspendió dos días después durante un mes para darse tiempo para negociar un acuerdo y a la vista de las primeras medidas adoptadas por sus vecinos.
La semana pasada, México desplegó 10.000 efectivos de la Guardia Nacional a lo largo de los 3.100 km de la frontera con Estados Unidos, y Canadá nombró a un «zar del fentanilo», entre otras medidas.
Los tres países son socios desde 1994 de un acuerdo de libre comercio regional que fue renegociado en 2020 por exigencia de Trump durante su primer mandato (2017-2021) y debe ser revisado en 2026.