¿Por qué no se aguanta la austeridad?
Foto: Alejandro Meléndez / FotorreporterosMx
Por Arturo Huerta González
Periodistas Unidos. Ciudad de México. 10 de junio de 2020.- La falta de conocimiento de economía moderna por parte de los tomadores de decisiones del gobierno, están llevando al país a una crisis profunda. Para el gobierno todos debemos aguantar la austeridad. Lo que no entienden, es que para que el sector privado cuente con finanzas sanas que le permitan aumentar consumo e inversión, pagar su deuda e impuestos, el gobierno debe trabajar con gasto deficitario. Es decir, gastar más que sus ingresos, y más si están cayendo las exportaciones, pues ello merma más el ingreso de las empresas y familias. Pero ello no acontece. Ha venido predominando la política de austeridad y de ahorro del gobierno para no endeudarse, como si la deuda fuera mala. Al tratar de ahorrar el gobierno y no caer en deuda, recorta el gasto, lo cual disminuye las ventas e ingresos de las empresas y la generación de empleo. Ello está ocasionando quiebre de empresas y que muchos individuos no tengan ingreso para llevar a sus familias. Ellos son los que no aguantan la austeridad del gobierno, porque está atentando sobre el desarrollo económico y el nivel de vida de la población, que no se contrarresta con la política social.
Las empresas, además de ver restringidas sus ventas internas, han caído también sus ventas al extranjero. Las exportaciones de México a EUA en abril cayeron 44.4% respecto a marzo y en relación a abril de 2019 cayeron en 47%. Todo ello restringe la producción y la inversión privada, la cual cayó en marzo -11.1% y ya venía con 14 meses de bajas consecutivas. Como consecuencia de ello en el mes de abril el INEGI reportó que 12.5 millones de trabajadores dejaron el mercado laboral. De ahí que se contrae el consumo y la actividad económica. Al disminuir el ingreso de empresas y familias, el gobierno termina recaudando menos impuestos, por lo que prosiguen las presiones sobre las finanzas públicas y aumenta la deuda. A ello se suma que el mayor desempleo ocasionado por la austeridad fiscal, presiona por mayor gasto social, como por mayor presupuesto a la seguridad pública por el aumento de la delincuencia ocasionada por el crecimiento de la pobreza. De ahí que algunos pronósticos señalan que el gobierno terminará el 2020 con déficit fiscal de alrededor del 6% del PIB y una deuda pública de aproximadamente del 60% del PIB, y no por haber gastado más, sino como consecuencia de haber disminuido el gasto público.
La austeridad fiscal es insostenible. Es inaguantable. Al tratar el gobierno de equilibrar sus finanzas, gastando menos, termina contrayendo el ingreso nacional y recaudando menos, por lo que no logra el equilibrio fiscal, ni reducir el monto de la deuda. Y mas insostenible es la austeridad fiscal, en momentos en que están cayendo las exportaciones, como el consumo e inversión privada, pues se evidencia que no hay motor alguno de crecimiento. La economía está compuesta por tres sectores. El sector privado (empresas y familias), el sector externo y el gobierno. El sector privado enfrenta fuerte caída de sus ingresos, debido al menor gasto público, como por la caída de exportaciones. Ello lleva a contraer inversión, consumo, como el pago de sus obligaciones tributarias y financieras, lo que ahonda la contracción económica y aumenta el desempleo. El sector externo es adverso a la economía por la fuerte caída de exportaciones, por la menor entrada de remesas (en abril tuvieron una caída de 28.5%), el menor turismo internacional, menor entrada de capitales y fuerte salida de capitales (salieron 29 mil millones de dólares en el primer trimestre de 2020). Y si a eso sumamos que el gobierno defiende su austeridad fiscal, donde recorta partidas significativas de gasto e inversión para pagar deuda y para apoyar sus políticas sociales y sus macro-proyectos de los trenes, del aeropuerto y de la refinería de Dos Bocas, el efecto neto está siendo mayor contracción de la demanda, de la producción y aumento del desempleo. De ahí los pronósticos para el 2º. Trimestre son que la actividad económica caerá entre el 20% y 44%.
El gobierno debe dejar su política de austeridad fiscal e incrementar el gasto público para dinamizar el mercado interno y contrarrestar la caída de exportaciones, del consumo e inversión privada, para frenar la crisis y el alto desempleo existente. Eso de que “hay que aguantar la austeridad”, nos conduce a una profunda crisis, alto desempleo, que desestabilizará al país.
El gobierno puede gastar sin tener problemas financieros. Debe acordar con el banco central – como están haciendo otros países -, a pesar de la autonomía del banco central, para que éste le compre deuda pública a cero tasa de interés, para así poder incrementar el gasto para apoyar a hospitales, médicos y enfermeras en el combate a la pandemia, para apoyar Estados y Municipios, para preservar la planta productiva y generar empleo a todo aquel que lo requiera, pues ellos no aguantan más la austeridad. Al crecer la economía, aumentará el ingreso de empresas e individuos, y el gobierno recaudará más y con ello pagará la deuda. La deuda solo se puede pagar y reducir en contexto de crecimiento económico, nunca se puede pagarla y reducirla cuando la economía está en crisis.