Por segundo año consecutivo, Telmex no dio reparto de utilidades a trabajadores + Video
Foto: Cuartoscuro
- Por segundo año consecutivo, de Telmex no tuvieron reparto de utilidades.
- Telmex no paga utilidades a pesar de reportar ingresos por más de $90,000 millones en los dos últimos dos años.
- Los dueños de Telmex han vaciado la empresa al llevarse los servicios más rentables a Telcel.
Periodistas Unidos. Ciudad de México. 25 de junio de 2020.- Por segundo año consecutivo, los trabajadores de Telmex no tuvieron reparto de utilidades. Causa extrañeza porque es una empresa que logra ingresos por más de noventa mil millones de pesos en los últimos dos años a pesar de las restricciones que le ha impuesto el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), mientras que con las demás empresas de telecomunicaciones en el país fomenta el parasitismo al no obligarlos a realizar inversiones de buen calado para desarrollar la infraestructura de transporte.
Pero no es la única razón. Los dueños de Telmex prácticamente han vaciado a esta empresa al llevarse los servicios más rentables a su otra empresa, Telcel; también, al contener la expansión de su plantilla laboral, debiéndole al sindicato el cubrimiento de más de doce mil vacantes y haciendo recaer en Telmex los costos de la expansión de la infraestructura de conmutación y de transporte para que Telcel recoja las ganancias. El resultado de esta política es el estrangulamiento financiero de Telmex, que impide que los telefonistas activos en Telmex tengan reparto de utilidades.
Por otra parte, los trabajadores telefonistas padecen, al igual que todos los mexicanos, una política tributaria en la que se grava todo su ingreso (con excepción de los pocos gastos que se deducen como los médicos), mientras que a los empresarios se les deducen prácticamente la totalidad de sus gastos y costos. De esta manera, las empresas se ahorran el pago de una cantidad muy grande de impuestos.
Pero también la contabilidad influye para que las empresas paguen poco por reparto de utilidades o que de plano la eludan. En toda empresa los trabajadores producen año con año una masa de ganancia que se reparte de varias maneras: una rebanada se la queda el gobierno en forma de impuestos; otra rebanada se va al pago de los intereses por las deudas que contrae la empresa, por las variaciones del valor del peso frente al dólar o lo que cobra de intereses por los préstamos que llegue a hacer. Y otra rebanada se la queda la empresa en forma de “Utilidad Neta”, por citar las más relevantes. Así, Telmex declaró tener en 2019 una pérdida por más de 8 mil millones de pesos, mientras que América Móvil una utilidad neta de poco más de 70 mil millones de pesos.
Pero, tomando en cuenta no la contabilidad convencional sino los criterios de la Economía como una ciencia, si sumamos todas las rebanadas que forman la ganancia en cada una de estas empresas, resulta que Telmex produjo al menos una ganancia global de $12,366,915,000.00 compuesta de la suma del Costo del financiamiento, la Utilidad neta de compañías asociadas y el pago del ISR. Visto así, Telmex es una empresa rentable, aunque la magia de la contabilidad la reporte con pérdidas.
En el caso de América Móvil, las rebanadas que forman su ganancia global están compuestas del costo de financiamiento, de la utilidad neta de compañías asociadas, del ISR, el Interés minoritario y la utilidad neta. Todas ellas suman nada más y nada menos que 157 mil 405 millones 926 mil pesos, es decir, más del doble de lo que declara de utilidad neta.
Por otra parte, las empresas del prominente empresario Carlos Slim incluyen en los costos de ventas los pagos por jubilaciones y pensiones pactados en los contratos colectivos de trabajo. Cosa rara, porque los jubilados ya no intervienen en la producción de las mercancías y servicios que venden las empresas, lo cual implica una duplicación de los costos, mermando así el monto de utilidades a repartir entre los trabajadores.
Más extrañeza provoca lo anterior porque desde la privatización de Telmex se creó un Fondo de Fideicomiso destinado a solventar los pagos de finiquitos por jubilación y por las pensiones pactado en su contrato colectivo de trabajo. Dicho fondo fue alimentado por los propios telefonistas, al destinarse año con año una parte de la riqueza que producían durante toda su vida laboral. Con mayor razón, no tiene sentido que estos desembolsos se carguen como costos de ventas, aún a pesar de que las normas contables lleguen a establecerlo.
Sin embargo, su ya longeva dirección sindical se ha limitado a meter inconformidades, pero no ha ido al fondo del asunto, dejando hacer la voluntad de la empresa. O los dueños de Telmex están cometiendo un ilícito contable, o desde hace años la dirección del sindicato tuvo que impulsar una reforma a la Ley del ISR para eliminar esta doble contabilidad de costos que afecta el reparto de utilidades a los telefonistas.
También desde hace ya muchos años debió haber contenido los apetitos voraces de los dueños de AMX para evitar que Telmex fuese vaciada material y financieramente, de la misma manera que debió haber asumido una postura firme para evitar las lesivas decisiones que tomó el IFT que terminaron por partir en dos a Telmex en marzo de este año.