La política fiscal debe cumplir los propósitos nacionales de crecimiento y empleo
Por Arturo Huerta González
Periodistas Unidos. Ciudad de México. 04 de noviembre de 2023.- El secretario de Hacienda el 26 de octubre 2023 en una conferencia en la UNAM señaló que “el presupuesto público durante esta administración adquirió el mandato político de pertenecer a las mayorías; si bien durante ejercicios previos cubrió también aspectos sociales, “en general (…) ha estado capturado en gran medida por intereses privados”. Al respecto cabe decir que la función de las finanzas públicas debe encaminarse a cumplir los objetivos públicos de crecimiento y empleo. Debe crear condiciones para que el sector privado invierta en el sector productivo y en la generación de empleo y el gobierno debe crear empleo para todo aquel que lo busca y no lo encuentra. Decir que en esta administración el presupuesto público “adquirió el mandato político de pertenecer a las mayorías”, no es una realidad. El hecho que la política fiscal contempla un presupuesto significativo a la política social no implica que dicha política pertenece a las mayorías, debido a que el PIB en estos 5 años de gobierno trae un crecimiento de 0.4% promedio anual y el crecimiento del PIB per cápita es negativo. El presupuesto público debe ser de tal magnitud que contrarreste la caída de consumo e inversión privada, así como el efecto negativo que el déficit de comercio exterior tiene sobre la actividad económica, para que se vean beneficiado empresas e individuos y dicha función no la ha cumplido. Se ha priorizado la austeridad fiscal, que ha generado el contexto de estancamiento que padece la economía nacional. En el 2020 el gobierno no apoyó a las empresas frente a la fuerte caída de la actividad económica, conde en 18 meses cerraron 400 mil empresas y la postura del gobierno era de que se las arreglaran por si solas. Todo gobierno debe apoyar la esfera productiva pues es generadora de riqueza y de empleo y ello no se hizo y de ahí el contexto recesivo e inflacionario y de creciente subempleo, pobreza y delincuencia que vive el país.
El secretario de Hacienda dijo que en el pasado predominaban las asociaciones público-privadas, “que ocupan el presupuesto por largos periodos y quitan flexibilidad a los gobiernos para hacer sus propias estrategias de desarrollo”. Hay que señalar que dichas asociaciones continúan en el presente gobierno. El sector privado sigue presente en la infraestructura, en Pemex, en la CFE y hasta las impulsan en la explotación de litio.
Dijo el Secretario que “la capacidad de deuda que tiene el gobierno, ya no se usa para el beneficio de intereses privados, en específico grupos especiales de interés, sino se usa para el interés general”. Aquí también se equivoca, debido a que ha crecido la deuda pública como consecuencia de la alta tasa de interés establecida por Banxico para atraer capitales y así apreciar la moneda nacional y abaratar el dólar y las importaciones y así tratar de reducir la inflación. Quien se ha beneficiado de la deuda no ha sido el interés nacional, sino el capital financiero internacional que gana esas altas tasas de interés y los recursos obtenidos se reciclan vía crecimiento de importaciones, las cuales desplazan a la producción nacional e incrementan el déficit de comercio exterior que frena el crecimiento económico. La deuda no ha sido para incrementar la inversión y el empleo formal y el crecimiento económico, sino para financiar el déficit de comercio exterior y para pagar deuda.
El Secretario puso como ejemplo de “realizar inversión pública para atraer privada tiene un testigo en la región del Istmo de Tehuantepec…donde se aproveche parte de la relocalización de cadenas de producción global hacia el país”. Siguen impulsando la estrategia de promover entrada de inversión extranjera para que venga a exportar, estrategia que está presente desde los años ochenta y no ha configurado condiciones endógenas de crecimiento sostenido, donde las únicas beneficiadas han sido tales empresas transnacionales que aprovechan la baratura de mano de obra y las ventajas de localización de ser vecinos del principal mercado de mundo. En vez instrumentar política industrial a favor de las empresas nacionales para sustituir importaciones y depender menos del exterior, se continúa promoviendo estrategias fallidas de crecimiento de exportaciones en un contexto donde el comercio internacional crecerá este año en 0.8% y no se ven perspectivas de crecimiento de la economía y el comercio internacional, dado que muchos países están avanzando en el auto abasto y además se observa una desaceleración de la economía internacional por las altas tasas de interés y la austeridad fiscal.