Cinco años de impunidad
Foto. Alejandro Meléndez
Por Jorge Meléndez Preciado
Periodistas Unidos. Ciudad de México. 30 de septiembre de 2019.- Han salido 77 de los 142 detenidos por el caso Ayotzinapa, entre ellos Gildardo López Astudillo, motejado El Cabo Gil, de Guerreros Unidos. La famosa verdad histórica del todavía cansado- tiene voz de ultratumba en sus entrevistas- Jesús Murillo Karam, es algo que no cree ni el más ingenuo. Tomas Zerón de Lucio, un policía con malísimos antecedentes y quien sembró pruebas en diferentes partes, está más callado que Echeverría. Hay policías que estaban en Guerrero, el ex teniente Leonardo Vázquez Pérez, designado en dicha corporación por el boquiflojo Ángel Aguirre Rivero, que se fueron de México y regresaron. El trabajo del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), cuestionado por los medios pagados en exceso por Enrique el del peluquín, ahora es valorado y parte de los informadores que los criticaron actualmente los elogian.
Podríamos seguir haciendo un recuento de las aberraciones e injusticias contra los padres de los 43, que en el pasado los revictimizaron, los trataron despóticamente, los ignoraron y hasta les dijeron que no siguieran su búsqueda porque sus hijos formaban parte de grupos delincuenciales, especialmente traficantes de droga.
Pero el 26 de este mes Andrés Manuel, Alejandro Encinas, subsecretario de Gobernación, y Omar Gómez Trejo, fiscal del caso, portaron en Palacio Nacional una playera emblemática con el objeto de mostrar que están por hacer justicia y apoyan la lucha de estos mexicanos- como cientos de miles antaño- que buscan justicia y han encontrado en la autoridad la burla, el desdén y hasta la denigración en la mayoría de medios informativos, aún manipulados por el dinero.
La marcha el viernes 27 fue nutrida y no complaciente. Los que han luchado, incansablemente, durante un quinquenio dijeron que se necesitan realizar las investigaciones pronto, bien y a fondo. Y Gómez Trejo afirmó que se citará a todos los involucrados, incluyendo a Murillo y a Enrique Peña Nieto.
En la manifestación conmemorativa participaron unos cuarenta jóvenes, hombres y mujeres, que se autonombran anarquistas y de dedicaron a vandalizar todo lo que había a su paso, lo mismo una librería que las puertas de Palacio Nacional, sin que la autoridad impidiera los desmanes. La secretaria de gobierno de la Ciudad de México, Rosa Icela Rodríguez, señaló que ya tienen ubicados a los que realizaron destrozos y los castigarán. Algo que incluso piden los padres de los 43 estudiantes normalistas.
La exigencia de justicia, antes, ahora y siempre estará presente en un México en donde sus autoridades continúan siendo despóticas y arbitrarias, salvo excepciones.
@jamelendez44