Por Nurit Martínez
Periodistas Unidos. Ciudad de México. 07 de abril de 2024.- A unas horas de que las candidatas y el candidato a la Presidencia de la República tomen un espacio para prepararse para el primer debate rumbo a la elección del 2 de junio es necesario advertir que hasta las propuestas de las tres fuerzas políticas en disputa no tienen ningún planteamiento para la niñez que se va a enfrentar a la competencia global de la segunda mitad del siglo al mundo laboral, como profesionales, padres de familia y ciudadanos.
¿A qué aspiran los candidatos?, ¿a qué aspiramos los ciudadanos que el 2 de junio saldremos a las urnas a depositar nuestro voto? No es para menos, se trata de un tercio de población para la cual aún no hemos escuchado alternativas claras.
Al inicio de este siglo al menos la aspiración de las fuerzas políticas, en materia educativa, se centraron en proponer inglés y computadoras para la formación en la educación básica.
De manera decidida las dos principales fuerzas políticas de entonces con sus candidatos Vicente Fox y Francisco Labastida ofrecieron propuestas claras que se replicaron en la siguiente elección de 2006, cuando lo mismo hicieron Felipe Calderón, Roberto Madrazo y Andrés Manuel López Obrador.
Producto de ello, a partir del año 2000 se desarrollaron políticas públicas para incorporar a docentes, pagar horas a los profesores incorporados al sistema público, desarrollar materiales e incluir la propuesta en el plan y los programas de estudio para que el inglés fuera una segunda lengua.
En el caso de las computadoras, el escándalo llegó con el proceso de compra y adquisición de equipos para dotar a las escuelas de pizarrones, proyectores y computadoras para llevar las nuevas tecnologías a las aulas a través de Enciclomedia.
El avance gradual planteado llegó a beneficiar sólo a una generación de alumnos que cursaron quinto, sexto y los tres grados de secundaria. Sólo que muy pronto se reveló la desigualdad de la atención, además de esquema de corrupción que imperó en la compra en miles de millones de pesos.
Según el entonces Informe de resultados de la Subcomisión para Investigar y Dar Seguimiento a Todo lo Relativo al Programa Enciclomedia entre 2004 y 2006 de la Cámara de Diputados hubo irregularidades por mil 672 millones de pesos y el incumplimiento de equipos en 11 mil 177 aulas.
Los legisladores detectaron un quebranto por 11 millones de dólares en la compra de 50 mil licencias de software de Enciclomedia a sobreprecio. A ello se sumaron otros 37 millones 254 mil pesos por equipos que no se comprobó que se instalaron, así como falta de seguimiento para recuperar 3 millones 264 mil 280 pesos a las aseguradoras por equipos siniestrados en desastres naturales de Tabasco y equipos robados en otras entidades.
En la administración de Felipe Calderón ese proyecto de cambio por dotar de computadoras a los niños no estuvo exento de denuncias e irregularidades millonarias, así como la acusación de compras acordadas a sobreprecio.
Esa propuesta continuó en los primeros años de la gestión del priista Enrique Peña hasta que se desató la polémica de que los niños utilizaban las computadoras personales para ver películas o jugar, o bien, en el peor de los casos, fueron a parar a las casas de empeño ante la falta de otros apoyos complementarios como becas alimenticias.
Al finalizar esa gestión el deterioro tecnológico era más que evidente, mientras que para la asignatura de inglés todo pareció caminar en automático, la presencia de profesores y materiales hicieron obvio el caminar por ese camino.
En la siguiente elección, la de 2018, tanto el inglés como dotar de equipos tecnológicos dejó de ser prioridad; los que se pensaban inscritos en los planes y programas y en las acciones de gobierno parecieron no necesitar reforzar los programas.
A pesar de que la pandemia evidenció la necesidad de que los alumnos pudieran contar con herramientas tecnológicas para dar continuidad a sus estudios a distancia, nada movió a los hasta ahora tres titulares de la Secretaría de Educación Pública (SEP) (Esteban Moctezuma, Delfina Gómez y Leticia Ramírez).
Es la hora de plantear la formación de una nueva generación, la que saldrá al mercado laborar en los años 40 de este siglo y hasta ahora las candidatas y el candidato a la Presidencia de la República centran su atención en la dotación de becas a la niñez.
¿Cuál es el perfil de ciudadano mexicano que están planteando los aspirantes al máximo cargo de gobierno en el país? ¿Con qué herramientas pretenden que se formen las nuevas generaciones en la educación básica, media superior y superior para impulsar el desarrollo socioeconómico de México? Hasta ahora no hay propuestas. Habrá que escuchar el domingo, pero por ahora no hay ningún planteamiento concreto.
Sabemos que los niños no votan, pero además de salud, seguridad y espacios libres de violencia, la niñez requiere alternativas claras en una ruta de desarrollo personal que permita mejores condiciones de bienestar en México. Más ahora que el mundo se debate en el futuro e impacto de la Inteligencia Artificial. El domingo es la cita en el debate, preparen palomitas.