Por Jorge Meléndez Preciado
Periodistas Unidos. Ciudad de México. 03 de diciembre de 2023.- Según cifras de la Organización de Naciones Unidas (ONU), 81 mil mujeres y niñas son asesinadas al año. De ellas, 45 mil, o sea el 56 por ciento por parte de sus familiares, lo que es una barbaridad, ya que en los hogares (¿cristianos?) se comenten la mayoría de los abusos y crímenes.
En México, hay tres mil homicidios; es decir, 8.1 diarios, aunque ciertas traficantes de noticias señalan que son 12 cada jornada.
Cómo sea, es una barbaridad, ya que no sólo en las calles, los lugares de recreo o diversión ocurren las tropelías, sino insistimos en los sitos que deberían ser más seguros, las habitaciones, hay abusos por familiares cercanos y hasta padres de diverso tipo.
Por eso, la lucha de las hermanas Mirabal, las llamadas Mariposas: Patria, Minerva y María Teresa, que el 25 de noviembre de 1960 fueron asesinadas por el régimen de Rafael Leónidas Trujillo en República Dominicana, continúa siendo importante.
María Teresa, entonces sentenció: “Sacaré los brazos de la tumba y seré más fuerte”. Y se cumplió.
Desde 1999, la ONU conmemora el 25 de noviembre como la jornada para la liberación de las mujeres, la cual termina el 10 de diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos.
Hay pendientes en todas partes, ya que, en Estados Unidos, el preparador de gimnastas, Larry Nassar, abusó de jovencitas durante años y luego de un largo juicio fue sentenciado a 175 años de prisión, aunque destrozó vidas y familias por montones.
Recientemente, Luis Rubiales, encargado dela patabola en España, besó inapropiadamente a Jennie Hermoso, y también fue amplio su proceso hasta que fue condenado a tres años de inhabilitación.
En México hay muchos casos, algunos callados o escondidos, como el de Scarlett Camberos, que desertó del Club América y se fue a jugar al vecino del norte porque nadie tomó en cuenta sus posiciones y ahora milita en el Angel City.
Recientemente, en canal 11 vimos una entrevista a la comentarista de una cadena televisiva internacional, Marion Reimers, donde Heriberto Murrieta le preguntaba a la maestra de periodismo los obstáculos pasados y presentes, con el objeto de abrirse paso en su actividad.
Es una lección que todos debemos escuchar para darnos cuenta de la doble, triple o no sé cuántas jornadas tienen que enfrentar ellas para ser tomadas en cuenta, en serio.
(Una muestra, por cierto, de que los canales oficiales cumplen su tarea encomendada, como sucede con las series Primer Plano y Poder y Dinero, entre otras).
Abolir el machismo, enfrentar a los poderes desde los patriarcales a los eclesiásticos pasando por los mediáticos y otros, es un deber ineludible en estos momentos para que ellas tengan un orbe menos opresivo.
Aunque hay otras mujeres que son de cuidado.
Por ejemplo, el trío que apoya a Javier Milei: su hermana, Karina; la vicepresidenta, Victoria Villaruel, militarista al extremo, y la derechista que le abrió paso. Patricia Burllich, con lo cual ganó este sujeto que con su motosierra en la mano también cortará a una gran cantidad del 70 por ciento de los millones de jóvenes argentinos que votaron por él.
Pero, en general, debemos apoyar fervientemente a las Mariposas que adornan el jardín llamado Tierra.
¡Es hora de las mujeres!