#NUCLEARBAN: Belice y el desarme nuclear
Por Jurgis R
Periodistas Unidos. Ciudad de México. 19 de junio de 2020.- Después de hacer consciencia sobre sus genocidios y asesinatos, la humanidad ha prohibido la fabricación y uso de las armas químicas, biológicas, bombas en minas terrestres y de racimo. La Organización de las Naciones Unidas (ONU), mediante diferentes tratados ha prohibido dichas armas y pretende poner en marcha el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares (TPNW, por sus siglas en inglés), con lo cual legalmente se eliminarían las armas más peligrosas jamás inventadas. ¿Qué se necesita? La firma y ratificación de al menos 50 países, de las cuales ya se tienen 37.
La última nación en ratificar el TPNW ha sido Belice, nación de América Latina que tiene alrededor de 390 mil habitantes, 40% de los cuales están en la pobreza. Al ratificar el tratado, este pequeño país ha demostrado el tamaño de su soberanía e interés por la paz y la vida, algo totalmente urgente de emular, especialmente por los países ricos e industrializados, los cuales brillan por su ausencia.
¿Por qué no están en la lista el Reino Unido y Estados Unidos, tan fervientes “defensores de la paz en el mundo”? ¿Dónde está Alemania, que es la vanguardia económica de Europa? ¿Por qué no han firmado Finlandia y Suiza, que tienen el primer y segundo mejor sistema de educación europeo? ¿Qué pasó con Francia, quien presume sus 58 reactores nucleares para la producción de energía libre de CO2? ¿Qué sucede con los países cuya cultura todos deben de copiar?
¿Por qué tampoco vemos a Holanda, paradigma de las energías renovables y de la sustentabilidad, acaso no le importa el invierno nuclear? ¿Dónde está Italia? ¿Cuándo firmarán Noruega y Suecia, países idílicos en la calidad de vida y derechos humanos si se comparan con los países de América Latina y África? ¿Dónde está Japón y su memoria de Hiroshima y Nagasaki?
Lo que es todavía más escandaloso es saber que los gobiernos de las naciones industrializadas ni siquiera son firmantes o signatarios en el TPNW. Eso sí, la mayoría forman parte de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), que les permite detentar armas nucleares. Nada más Alemania y Holanda mantienen veinte cada quien, quizás pensando que pueden ganar una guerra nuclear o peor aún, imaginando que su alianza militar con Estados Unidos garantizará su seguridad.
Los países ricos, específicamente Estados Unidos, se jactan de ser el ejemplo del “mundo civilizado”, de la “paz”, de “la libertad y la democracia”, pero al parecer millones de personas piensan lo contrario.
Son precisamente esos países quienes hacen enormes inversiones de dinero en armas nucleares. Patrocinados por las instituciones financieras, de 2014 a 2018, India, Francia, Reino Unido y Estados Unidos invirtieron 525 mil millones de dólares para la producción, mantenimiento y modernización de armas nucleares. En ese periodo de tiempo no solo nació el TPNW, sino que fue ratificado por 17 países, entre ellos Guyana, Cuba, México, Palestina, Vietnam y Gambia, todos del llamado “tercer mundo”.
Eso países pauperizados, invadidos, saqueados o bombardeados están asumiendo, como es costumbre, la lucha por el desarme y la paz. La ratificación de cualquier país en el TPNW, rico o pobre, cuenta de igual manera. En este sentido hay democracia, por lo tanto, existe la esperanza de eliminar las armas nucleares. Aquí como en pocas ocasiones, no hay medias tintas, es la vida o la muerte de la especie humana.
A mediados de 2017 se dio a conocer el TPNW, el cual fue negociado por 135 países con carácter permanente y vinculante para las naciones, es decir que, una vez ratificado, quedarían prohibidas las armas de destrucción masiva por excelencia: las nucleares.
¿Salvar al mundo con una firma y ratificación? Sí. Así lo pretenden algunas naciones, la mayoría de las cuales son económicamente pobres, poco o nada industrializadas pero conscientes de lo que representa una guerra nuclear, en la cual, solo puede existir un ganador: la extinción del mundo civilizado.
La forma legal de acabar con las armas de destrucción masiva existe y se llama Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares. Belice ha realizado un paso enorme para poner fin a dichas armas. Excelente ejemplo para los estatistas del mundo.
Naciones que han ratificado el TPNW:
- Guyana (20 de septiembre de 2017)
- Santa Sede (20 de septiembre de 2017)
- Tailandia (20 de septiembre de 2017)
- México (16 de enero de 2018)
- Cuba (30 de enero de 2018)
- Palestina (22 de marzo de 2018)
- Venezuela (27 de marzo de 2018)
- Austria (08 de mayo de 2018)
- Vietnam (17 de mayo de 2018)
- Costa Rica (05 de Julio de 2018)
- Uruguay (25 de julio de 2018),
- Nueva Zelanda (31 de julio de 2018)
- Islas Cook (04 de septiembre de 2018)
- Gambia (26 de septiembre de 2018)
- Samoa (26 de septiembre de 2018)
- San Marino (26 de septiembre de 2018)
- Vanuatu (26 de septiembre de 2018)
- Santa Lucía (23 de enero de 2019)
- El Salvador (30 de enero de 2019)
- Sudáfrica (22 de febrero de 2019)
- Panamá (11 de abril de 2019)
- Palau (03 de mayo de 2019)
- Bolivia (06 de agosto de 2019)
- Kazajstán (29 de agosto de 2019)
- Nicaragua (19 de julio de 2019)
- San Vicente y Granadinas (31 de julio de 2019)
- Ecuador (25 de septiembre de 2019)
- Antigua y Barbuda (26 de septiembre de 2019)
- Bangladesh (26 de septiembre de 2019)
- Kiribati (26 de septiembre de 2019)
- Laos (26 de septiembre de 2019)
- Maldivas (26 de septiembre de 2019)
- Trinidad y Tobago (26 de septiembre de 2019)
- Dominica (18 de octubre de 2019)
- Paraguay (23 de enero de 2020)
- Namibia (20 de marzo de 2020)
- Belice (19 de mayo de 2020).
El tratado de 2017 de la ONU se pondrá en marcha cuando se tenga la ratificación de 50 naciones. Con ello quedarán prohibidas tanto las armas biológicas, químicas, minas terrestres, bombas de racimo y armas nucleares. Imagen adaptada del Boletín de los Científicos Atómicos.