Por Arturo Huerta González
Periodistas Unidos. Ciudad de México. 27 de diciembre de 2024.- Rodrigo Gómez fue director del banco central de 1952 hasta 1970 y bajo sus órdenes disminuyó la inflación en condiciones de crecimiento económico. La inflación fue de 3% promedio anual y la economía tuvo un crecimiento de 6.4% promedio anual en ese período. Comúnmente, se adjudica a Antonio Ortiz Mena, quien fuera secretario de Hacienda en esos años, el que logró el desarrollo estabilizador en el país. Sin embargo, desde mi punto de vista fue la visión desarrollista de Rodrigo Gómez en beneficio de la sociedad, que lo llevó a instrumentar una política monetaria de impulso a la producción para compatibilizar baja inflación con crecimiento económico y no como ha acontecido desde la autonomía del banco central, donde solo se privilegia bajar la inflación, a costa de sacrificar el crecimiento económico. Rodrigo Gómez señalaba que la sola estabilidad de precios no impulsaba el crecimiento económico y no traía beneficios a la sociedad en su conjunto, sino que se requería impulsar el desarrollo productivo y la generación de empleo, por lo que estableció bajas tasas de interés, impulsó los encajes legales que venían desde los años cuarenta, incrementó la disponibilidad crediticia y financiaba al gobierno, para así incrementar la inversión privada y pública para impulsar la producción. De tal forma, fue a través del aumento de la oferta que se redujo la inflación en condiciones de crecimiento económico. Los encajes legales a los que estaban sujetos todos los bancos se distribuían en créditos al sector agrícola y al sector industrial para el impulso de la sustitución de importaciones, como para financiar al gobierno y a los sectores estratégicos a baja tasa de interés, por lo que en ese período la banca comercial fue funcional al crecimiento económico, y no como ahora donde la banca está desregulada, gana lo que quiere y es disfuncional al crecimiento económico.
Bajo la dirección de Rodrigo Gómez, el banco central era una institución de fomento. Iban mancomunados baja inflación y desarrollo económico. En cambio, los neoliberales con la Ley Orgánica del Banco de México aprobada en 1993 y que empezó a operar en 1994, solo establecieron como único objetivo de dicha institución la baja inflación y no incorporaron el de crecimiento económico. De ahí que con la autonomía del banco central se ha tenido un bajo crecimiento económico de 2.4% promedio anual y en los últimos seis años éste ha sido de 0.7% promedio anual.
Rodrigo Gómez mantenía un circulante monetario de acuerdo con la producción de bienes y servicios, que es justo lo que tiene que hacerse para impulsar la producción y realizarla y así configurar una dinámica económica sostenida sin inflación. Se otorgaban créditos para impulsar la producción y el gobierno gastaba lo suficiente para impulsar y realizar la producción. Para más información del trabajo desempeñado por Rodrigo Gómez, véase el libro Rodrigo Gómez y Gómez (1897-1970). Un banquero central desarrollista, de María Eugenia Romero Sotelo, publicado por la Facultad de Economía, UNAM, 2021.
Ahora que se tiene que nombrar a un o una miembro de la Junta de Gobierno de Banxico, se ha dicho que debe tener experiencia en la secretaría de Hacienda o en el banco central, ello implicaría que seguiríamos como hemos estado en las últimas décadas en contexto de estancamiento y sin lograr bajar la inflación a su objetivo de 3%. Cabe mencionar que, en los países europeos hasta inicios de los años noventa, los miembros de las juntas de gobierno de los bancos centrales estaban compuestas por representantes del sector industrial, del sector agrícola, del sector externo (exportaciones, importaciones), del sector financiero, y de los sindicatos. Así, todos los sectores estaban representados y trazaban la política monetaria que beneficiara a todos ellos. Y el problema es que desde que el sector financiero pasó a ser el hegemónico a nivel mundial, los monetaristas fueron los designados a dirigir los bancos centrales para que éstos pasaran a actuar sobre todo a favor del sector financiero. De ahí los problemas de bajo crecimiento que se viene observando en las últimas décadas en la mayoría de los países, aunado a altas tasas de subempleo, bajos salarios y creciente desigualdad del ingreso a favor del sector financiero.
La presidenta de México afirmó el viernes 20 de diciembre del 2024 que va a buscar una persona con un buen perfil de finanzas, con una visión de desarrollo del país para sustituir a una persona de la Junta de Gobierno de Banxico que termina su período. De hecho, se debería cambiar a toda la Junta de Gobierno de Banxico que no tienen perfil de desarrollo del país, debido a que son tecnócratas monetaristas que solo han actuado a favor del sector bancario-financiero y ni siquiera han reducido la inflación a su objetivo. Se deben nombrar a profesionistas con la visión desarrollista que Rodrigo Gómez le imprimió al banco central y que instrumenten una política monetaria a favor del sector productivo y del empleo y así compatibilizar crecimiento económico, con baja inflación, lo que a su vez contribuiría a mejorar la distribución del ingreso. Se debe a su vez incorporar a la Ley Orgánica de Banxico el objetivo de desarrollo y alto empleo al de baja inflación.