Periodistas Unidos. Ciudad de México. 26 de mayo de 2021.- Entre más encuestas lee uno, las complicaciones para entender lo que pueda ocurrir el 6 de junio son mayores. Más todavía si escucha a los diferentes actores o incluso al árbitro electoral, Lorenzo Córdova, quien habla de la posible anulación de la elección, algo nunca visto en México. Claro, el activismo de Andrés Manuel no amaina; lejos de ello se incrementa.
Las empresas de demoscopia señalan que Morena ganará, aunque no con la amplitud que esperaba y no conseguirá la mayoría calificada, aunque con sus aliados (¿en qué ocasiones y hasta cuándo?) podrá hacer algunas transformaciones que necesita.
Si le hacemos caso a los especialistas de El País, el muy desprestigiado PVEM (las cuatro mentiras, Julio Astillero dixit), pasará de 11 a 53 diputados, es decir, ¡quintuplicará su representación! (sic espantado)
El caso de la Línea 12 trajo como resultado que la disputa por las 16 alcaldías en la Ciudad de México se hiciera más enconada. Ahora, según El Financiero (25 de mayo), en tres de ellas, muy importantes, ya puntea la Alianza Va por México. Esto es en Miguel Hidalgo, Álvaro Obregón y Gustavo A. Madero. Pero en Tláhuac, donde ocurrió el siniestro, va muy adelante Morena, y en la importante Cuauhtémoc, encabeza, Dolores Padierna.
En Guadalajara, donde Enrique Alfaro está desaparecido por la cantidad de secuestros que aumenta diariamente en Jalisco, la disputa por por la Perla de Occidente se hace más tensa entre el Movimiento Ciudadano y Morena.
En fin, como lo hemos anotado, habrá muchas sorpresas.
Una más es que el PRI, PAN y PRD quieren tener un bloque unificado, lo cual será imposible dado los protagonismos de los dos jefes, el tricolor, Alejandro Moreno- que ya se lanzó para la presidencia en 2024- y Marco Cortés, quien cuando no cae en actos se le viene el techo encima.
Un caso muy importante para analizar es el de los religiosos. Según el especialista, Elio Masferrer Kan (Proceso, 24 de mayo), el 85.9 de mexicanos son creyentes, entre católicos integristas y evangélicos fundamentalistas.
Y una cantidad menor, aunque sumamente importante, se dicen guadalupanos, ya que la Virgencita de Guadalupe es un símbolo que mueve hasta a los mexicanos que viven en Estados Unidos, hoy nuestros fundamentales proveedores de dólares.
Pero únicamente el seis por ciento toman en cuenta lo que dicen sus obispos en asuntos electorales. Los evangélicos, dice Elio, no mezclan la religión con la política; al contrario, salen de sus templos y hacen su vida como la tienen diseñada por otras influencias.
Así pues, no obstante que la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), donde se reúnen mil 500 obispos, haya lanzado el 16 de abril una serie de consignas para que no se votara por quienes están “contra la vida, la institución matrimonial, la dignidad humana y la libertad religiosa” (sic hereje), su llamado no ha tenido eco.
El jueves 6 de mayo insistieron los de la CEM, con el fin de apoyar, según ellos, a quienes realizan “el bien común, la defensa de la vida desde la concepción y hasta la muerte natural”. Incluso hubo un documento titulado: Elecciones bajo la mirada de la fe, signado por la Arquidiócesis Primada de México.
Sólo aceptó esos dictados, Hugo Erick Flores, del Partido Encuentro Social (PES), quien se pronunció contra los matrimonios gay y la adopción de menores por parejas del mismo sexo. El derechista PAN, debido a su alianza, dejó de lado- como muchas otras cuestiones que abanderaba- esos pronunciamientos con el fin de seguir adelante en lo más importante, ganar posiciones como sea.
Curioso, el PES, hoy no tan cercano a López Obrador, tiene como abanderado en Baja California, al casinero Jorge Hank Rohn, quien es totalmente contrario a los principios de Hugo Erick, y en Atlixco, Puebla, hay una dupla por el distrito de esa localidad, que son Gaby y Fer (la segunda es una transexual que se llama Fernanda). Su propaganda en una de las calles principales, está frente a un local que anuncia: Baño y Placeres (sic gozoso).
Debido a una acción afirmativa del INE, medida acertada, todos los partidos deben tener cuando menos dos candidatos LGBTTTI en las 300 fórmulas, una por representación proporcional, y deberán estar en los 10 primeros lugares.
El PRD encabeza dichas reglas con 27 y los más renuentes son PAN y PES. Un caso ejemplar se da en Michoacán, donde va Daniel Preciado, transexual, que es parte de las autodefensas de Tepalcatepec, en dicha entidad, y se formó en el ITESO.
Regresando al especialista Elio Masferrer, un 18 por ciento de religiosos vive en unión libre, el 28 por ciento tienen a la mujer como jefa de la casa y hay miles de familias poligámicas que se dicen católicas.
Los cambios sociales, tan mal entendidos por los partidos políticos, se reflejarán en los comicios del 6 de junio, pero si no aprenden de ellos los grillos, serán rebasados como en varios países de América Latina y Europa, donde en Alemania los curas ya casan a homosexuales.
@jamelendez44