Debate de dos contra una: Gálvez exhibe, Sheinbaum rehúye a acusaciones y Álvarez Máynez defiende
Por Carlos Lara y Valery Fernanda Juárez
AMEXI. Ciudad de México. 19 de mayo de 2024.- El último de los tres debates de los presidenciables se convirtió abiertamente en una confrontación de dos contra una: Xóchitl Gálvez, que señaló vínculos de morenistas con el narcotráfico, y Sheinbaum, que rehuyó a los señalamientos y acusando a exgobernadores del PRI de corrupción.
En tanto, un emecista Jorge Álvarez Máynez en una clara postura a favor del oficialismo, pues atacó a la abanderada opositora de Fuerza y Corazón por México y tibiamente a la exjefa de Gobierno local y aspirante de Sigamos Haciendo Historia.
La última cita de las tres a dos semanas de las elecciones del 2 de junio fue una repetición de los otros debates, con acusaciones de vínculos del crimen organizado en las filas del oficialismo, desde al Presidente, Mario Delgado hasta la propia Sheinbaum, así como la alusión de que el PRIAN representa el pasado de las masacres como la de Tlatelolco, Acteal y el fraude electoral de 1988.
El escenario, el Centro Cultural Universitario Tlatelolco, con cientos de elementos de la Guardia Nacional y de militares vestidos de civiles, fue el recinto donde las propuestas nuevamente pasaron a segundo plano y donde Xóchitl exhibió una fotografía con miles de ciudadanos de la marea rosa en el Zócalo Zócalo capitalino.
Pronto empezaron los ataques
Debate que pasó de los asuntos terrenales como los abrazos a las madres de narcotraficantes a los religiosos como el uso de símbolos para ganar votos, de acusaciones al exministro Arturo Zaldívar, pero también a los dos García, al Luna de Calderón y al Harfuch de Sheinbaum.
Xóchitl Gálvez aseguró que el actual gobierno ha entregado la seguridad al crimen organizado por lo que propuso que ella habrá de atender la seguridad sin miedo.
“¿Cuál ha sido la estrategia de este gobierno? Entregarle el país al crimen organizado, por lo que yo propongo una nueva estrategia de seguridad, se acabaron los abrazos a los delincuentes. La Guardia Nacional tendrá un mando civil, las Fuerzas Armadas solo se enfocarán a lo que establece la Constitución: la seguridad nacional”, expresó.
Claudia Sheinbaum reviró y recordó que la guerra contra el narcotráfico fue impulsada por el expresidente Felipe Calderón para tener “permiso para matar y puso al frente de esa guerra a un personaje siniestro: Genaro García Luna”.
Álvarez Máynez, con su corazón más inclinado al oficialismo, expuso que la violencia y la inseguridad ha aumentado desde los sexenios de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, aseguró que el actual gobierno de Andrés Manuel López Obrador no cambió la política de seguridad, ya que continúa la militarización.
Gálvez Ruiz hizo quiso aclarar que en anterior debate llamó “narcocandidata” a Claudia Sheinbaum y le explicó a los mexicanos por qué lo hizo: “este no es un apodo ni un insulto, sino es una descripción de hecho”.
Citó lo que se menciona en el libro de Anabel Hernández, “La Historia Secreta”, donde se “establece que los testigos protegidos que tiene a García Luna en la cárcel son los mismos que aseguran haberle dado dinero al actual presidente para campañas políticas.
«En el último capítulo denominado ‘La heredera’ dice claramente cómo la señora Sheinbaum y su secretario recibieron sobornos y droga, eso lo dice el libro y debería aclararlo y como me va a decir que presente la denuncia, pues ya la presenté».
Por lo anterior, la aspirante presidencial de Morena, PT y PVEM, Sheinbaum Pardo le respondió sobre el particular a Gálvez Ruiz y le dijo que el libro de la periodista Anabel Hernández tiene fuentes que son ficción, por lo que señaló que «las fuentes son mejores que las de la Reina del Sur», de Arturo Pérez Reverte.
A su vez, Álvarez Máynez expuso que los mexicanos no se deben preocupar por cuál de los “García es peor, si García Luna o García Harfuch, ya que conmigo el que va asumir la tarea de pacificar al país, darle seguridad y acotar la impunidad es el presidente de la República, ya que es una tarea que no se puede delegar”.