México no tiene otra opción más que resolver la crisis de agua que enfrenta: ONU
Por Gerardo Carmona / C. Estado de México
AMEXI. Toluca, México. 24 de junio de 2024.- El relator especial de la ONU sobre los Derechos Humanos al Agua Potable y al Saneamiento, Pedro Arrojo Agudo, advirtió que la crisis global de agua que se vive en México no tiene otra opción más que resolverla.
Lo anterior, en virtud de que la mayoría de sus grandes urbes se encuentran en la franja central del país, por lo que no tiene la opción de implementar proyectos de tratamiento del agua de mar, como sí la tienen grandes urbes costeras, como Nueva York, Niza, Barcelona, Miami o Río de Janeiro.
Para hacer frente a esta situación, destacó, hay dos maneras de tratar de solucionar dicha crisis. La primera: es “hacer las paces con nuestros acuíferos, afluentes y humedales” y recuperar la salud de la ingeniería natural del ciclo hídrico.
Y la segunda, promover una gobernanza democrática del agua, entendida como un bien común no como una mercancía, garantizando los derechos humanos al agua potable y al saneamiento, siempre con la sombra del cambio climático en la ecuación.
En su visita al estado de México, el relator especial de la ONU consideró que la administración de la próxima presidenta, Claudia Sheinbaum, con un Congreso mayoritariamente a su favor y un apoyo popular sin precedentes, tiene la gran oportunidad de iniciar “una revolución del agua”.
Con la finalidad de impulsar una nueva Ley General del Agua que ponga al centro de las políticas en la materia a la gente y no a los intereses fácticos y comerciales, señaló.
Edomex va por revolución del agua
Por su parte, el secretario del Agua estatal, Pedro Moctezuma Barragán, adelantó que la entidad mexiquense pretende promover desde aquí una nueva Ley General del Agua para nuestra nación, cuya iniciativa se ha venido construyendo desde hace nueve años y espera que al entrar los nuevos diputados federales y senadores la revisen y puedan aprobarla.
Mientras tanto en lo local, indicó, que aquí se ha comenzado a avanzar sobre este tema con el Plan Sectorial 2023-2029 que se desarrolló entre las Secretarías del Agua, de Salud, Educación, Desarrollo Urbano, Campo, Turismo y Economía, que busca la preservación de la vida, con agua de calidad.
Pedro Moctezuma comentó que las acciones que se han puesto en marcha sobre la gestión del agua en esta administración van en contra de los trasvases de agua, es decir, traerla desde muy lejos y con altos costos; en contra de la excavación de pozos profundos, donde sólo se extrae agua fósil con metaloides.
Pero también para terminar en el corto plazo con los recortes al caudal de la Cuenca del Valle de México, con base en el combate al “huachicoleo de agua” o mejor dicho el tráfico ilegal del recurso; y en resolver el grave problema de fugas, donde se va un 40% del vital líquido.
Adelantó que próximamente se publicará en el Periódico Oficial Gaceta de Gobierno un acuerdo con nueve medidas para afrontar el grave problema del agua en la entidad:
1.- Ejecutar programas y acciones de rehabilitación y relocalización de pozos, y/o puntos de extracción.
2.- La reparación total de fugas en el Acueducto Metropolitano y el Macrocircuito.
3.- La habilitación, instalación y fuerza en la operación de plantas potabilizadoras.
4.- La sustitución de tuberías de asbesto por otras de polietileno de alta densidad.
5.- Construcción de acueductos y otra infraestructura para la distribución de aguas tratadas.
6.- El rescate de lagunas, cuencas, vasos y depósitos naturales o acuíferos.
7.- La construcción de presas filtrantes para la capacitación de agua pluvial.
8.- Creación de una unidad de recepción de reportes ciudadanos.
9.- Y, por último, desarrollar proyectos de cambio de paradigma en la gestión, mediante capacitación picos de tormentas, tratamientos de aguas, pulimiento en unidades, almacenamiento y disposición del agua.
Ello, abundó, aunado a la continuidad del diálogo con el Gobierno de Transición de Claudia Sheinbaum, y la próxima jefa de gobierno capitalino, Clara Brugada, para tratar de cambiar los convenios de agua de 1966, entre el entonces Distrito Federal y el Estado de México.
Recordó, que con dichos acuerdos se sacrificó a la entidad mexiquense quitándole una enorme parte del líquido para llevárselo a la capital del país; pero, desde esos tiempos a la fecha, las circunstancias se han modificado enormemente en ambas entidades y esto ya no puede seguir igual.