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Producto “patito” del mar que consumen los chilangos
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Por lo general, desconocen, que ingieren carne de especies en peligro de extinción o amenazadas
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Como el tiburón martillo y el tiburón toro
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Y, sin saberlo, son cómplices de un delito federal
Periodistas Unidos. Ciudad de México. 24 de diciembre de 2021.- La ilusión de muchas familias en la temporada navideña, es comer bacalao. Sin embargo, tres de cada 10 veces que se vende en la Ciudad de México es falso, asegura Oceana capítulo México.
Este engaño del bacalao puede ocurrir tanto en la venta en crudo como en la venta del platillo tradicional a la vizcaína que se sirve con papas, chiles, aceitunas, cebolla y jitomate.
En realidad, se trata de la carne de especies en peligro de extinción o amenazadas, como el tiburón martillo y el tiburón toro. Y los chilangos, Sin saberlo, son cómplices de un delito federal.
Y es que “al secar la carne -de las otras especies- con sal, se obtiene una consistencia similar (al bacalao)”, explicó Felipe Amezcua, investigador del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología (ICMyL) de la UNAM.
De acuerdo al informe Gato X Liebre: Edición Especial Tiburón, publicado por Oceana en México, los principales puntos de distribución donde se detectó la sustitución de bacalao son: pescaderías con 55%, restaurantes con 40% y supermercados con 4.5%.
En algunos puntos de venta, además, se incurre en fraude sobre el precio de los productos, por ejemplo, un local ofrecía “bacalao” a 290 pesos por kilo, cuando en realidad se trataba de raya, especie cuyo precio promedio es de 80 pesos.
El bacalao es un pez marino originario de aguas frías y que se extrae de los países escandinavos como Noruega y del norte de la Península Ibérica.
En 2021, Oceana invitó a la gente a sumarse, bajo la propuesta #CienciaCiudadana y envío de kits de identificación genética a personas voluntarias para analizar muestras de pescado en distintos establecimientos de la Ciudad de México.
Los resultados de esta investigación, la primera de su tipo en México, se publicarán el próximo año.
Para esta organización internacional enfocada en la protección de los océanos para la recuperación de las pesquerías y creación de áreas marinas protegidas “el que en México no tengamos una norma de trazabilidad facilita este tipo de fraude”.
Como consumidores no contamos con la información necesaria, desconocemos el origen de los pescados y mariscos que comemos. Esto daña gravemente la salud de los mares y altera el equilibrio de los ecosistemas marinos, asegura la ONG.
Para evitar que a los consumidores les den #GatoXLiebre durante las fechas decembrinas, época en la que más se consume bacalao en nuestro país, Oceana hace un llamado a Octavio Almada, Titular de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA) para que “apruebe la norma de trazabilidad de pescados y mariscos para su rastreo”.
Así podremos conocer el camino del pescado #DelBarcoAlPlato. La creación de la norma comenzó en 2019 y a la fecha no ha habido resultados concretos, por parte del ejecutivo o el legislativo.9
“Este tema debe interesar a la Secretaría de Economía (SE), pues al aprobarse la norma de trazabilidad generará oportunidades de exportación para pescadores artesanales y así mejorarían sus condiciones de vida e ingreso”, explica Oceana.
Para Mariana Aziz, Directora de Transparencia en Oceana México, “la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) podría ver un activo en este tema, pues la aprobación de esta norma mostraría un claro compromiso al cumplir con las obligaciones establecidas en el T-MEC como la protección de especies vulnerables, promoción de pesca sustentable y combate a la pesca ilegal”.
Así, querido lector, tenga cuidado al momento de comprar bacalao para evitar ser víctima de fraude. Mientras, denuncie ante la Profeco y se frenen los abusos.