Guillermo Prieto y el cólera

Foto: Especial

Por Humberto Musacchio

Periodistas Unidos. Ciudad de México. 24 de marzo de 2020.- En Memorias de mis tiempos, Guillermo Prieto narra la “imborrable impresión” que le dejó la epidemia de cólera de 1833: “Las calles silenciosas y desiertas en que resonaban a distancia los pasos precipitados de alguno que corría en pos de auxilios; las banderolas amarillas, negras y blancas que servían para dar aviso de la enfermedad, de médicos, sacerdotes y casas de caridad; las boticas apretadas de gente; los templos con las puertas abiertas de par en par con mil luces en los altares, la gente arrodillada con los brazos en cruz y derramando lágrimas… A gran distancia el chirrido lúgubre de carros que atravesaban llenos de cadáveres… Aún recuerdo haber penetrado en una casa, por el entonces barrio de la Lagunilla, que tendría como treinta cuartos, todos vacíos, con las puertas que cerraba y abría el viento, abandonados muebles y trastos… espantosa soledad y silencio como si se hubiese encomendado su custodia al terror de la muerte”.

Entre rezos, miedo y orgías

“El gobernador –sigue Prieto—que lo era el Sr. Gral. (Ignacio) Martínez (aMacaco, fulminó un bando con tremendas prohibiciones a las frutas, los figones y comestibles; en ese bando hay un anatema contra los chiles rellenos que escalofría… Los panteones de Santiago Tlatelolco, San Lázaro, el Caballete y otros, rebosaban de cadáveres: de los accesos de terror, de los alaridos de duelo se pasaba en aquellos lugares a las alegrías locas y a las escenas de escandalosa orgía, interrumpida por cantos lúgubres y por ceremonias religiosas… En el interior de las casas todo eran fumigaciones, riegos de vinagre y cloruro, calabazas con vinagre detrás de las puertas, la cazuela solitaria del arroz y la parrilla en el brasero, y frente a los santos, velas encendidas…

Viruela, cocoliztli, matlazáhuatl

En el siglo XVI, los conquistadores trajeron enfermedades que eran desconocidas en la actual América, como la viruela, que abrió la puerta al triunfo de los españoles sobre los tenochcas, y el cocoliztli, identificado apenas en 2018 como un mal producido por la Salmonella entérica subespecie Paratyphi C, caracterizado por intensa fiebre acompañada de copiosas hemorragias nasales y acumulación de pus en las glándulas parótidas, todo lo cual causaba la muerte en tres o cuatro días. De acuerdo con algunos estudiosos, otro padecimiento que causó 32 epidemias durante la colonia fue el matlazáhuatl o tifo exantemático, un mal que ya era conocido por las culturas indígenas. La epidemia de matlazáhuatl de 1545 causó el abandono del Colegio de Tlatelolco, tras de lo cual esa institución educativa para la nobleza indígena no volvió a alcanzar el brillo de sus primeros años.

Zancadilla a Paso de Gato

La Editorial Paso de Gato y la revista del mismo nombre están a punto de desaparecer. El director fundador de esta firma que ha promovido como nadie la literatura dramática, Jaime Chabaud, informó que los directivos de la Sogem aumentaron el alquiler de su sede de 18 mil a 40 mil pesos. De este modo, los actuales dirigentes de la Sociedad General de Escritores de México dan la medida de su aprecio por la cultura. Ya en 2017, por problemas económicos, la editorial dejó de publicar la revista Cine Toma, pese a que un año antes había obtenido el Premio al Arte Editorial de la Caniem. Pese a todo, en forma casi heroica se mantenía la publicación de textos para la escena y la revista Paso de Gato, que tan buenos servicios ha rendido a la gente de los foros. Ojalá que algún ser pensante de la Secretaría de Cultura, que los hay, entre al quite para salvar un acervo invaluable e impedir que desaparezca esa editorial que durante casi dos décadas ha cumplido una labor irremplazable.

Murió Pilar Luna

Falleció María del Pilar Luna Erreguerena (1944-2020), destacada especialistas en arqueología subacuática, quien fue pionera en el rescate y conservación de nuestras riquezas culturales sumergidas en la plataforma continental. Pilar Luna se incorporó en 1978 al Proyecto Templo Mayor bajo la dirección de Eduardo Matos y después Gastón García Cantú le encomendó la fundación del Departamento de Arqueología Subacuática del INAH, desde el cual la arqueóloga se opuso a la que la empresa estadounidense Odissey explorara en aguas territoriales mexicanas en busca de tesoros. Entre las distinciones que recibió se cuentan el Premio al Mérito otorgado por la Society for Historical Archaeology, la medalla J. C. Harrington y el Premio del Foro Arqueológico de Shanghai. Una profesional de alto rango y una patriota.

Breviario…

En su columna Casta Diva que aparece en el suplemento Laberinto, Avelina Lésper escribió que si bien Gabriel Orozco no cobra por “trabajar” (las comillas son de ella) en la ampliación de Chapultepec, a cambio le van a construir un museo “para su obra y la de artistas de su generación”, el Pabellón Contemporáneo al que Avelina llama “Museorozco”, lo que “salió más caro que si le hubieran pagado los honorarios a su limitadísima creatividad”. @@@ En la ciudad de México, donde nació en 1944, falleció Enrique Loaeza Tovar, hermano de Guadalupe y Soledad Loaeza. Nuestro pésame a su viuda, Esther, y a su familia.

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.

Easysoftonic