Periodistas Unidos. Ciudad de México. 28 de marzo de 2021.- El martes 23, en Palacio Nacional, 30 gobernadores de 32 (faltaron Quirino Ordaz, de Sinaloa, y Enrique Alfaro, de Jalisco alegando “problemas de agenda”) firmaron un Acuerdo Nacional por la Democracia para las elecciones del 6 de junio.
En las mismas, las más grandes que haya tenido el país: habrá 15 gubernaturas en juego, 500 diputados y más de 21 mil puestos en disputa. En dichos comicios se erogarán siete mil millones de pesos de nuestros impuestos, aunque se intentará evitar que el narco, los empresarios y las redes internacionales influyan decisivamente en muchos lugares. Misión casi imposible, aunque necesaria de intentar.
La iniciativa fue propuesta por Andrés Manuel hace un mes, y en el acto a puerta cerrada para los medios, trascendió que el ejecutivo hizo que los presentes se comprometieran a realizar elecciones “libres, limpias y aceptar la voluntad popular”.
Ello porque recordó López Obrador, en 2006 Felipe Calderón inició una guerra contra el narcotráfico para legitimarse, ya que su triunfo fue de 0.5 por ciento (“haiga sido como haiga sido”, afirmó el michoacano), lo que jamás se comprobó plenamente ya que no se abrieron las casillas suficientes para evitar dudas, algo que hace años planteó en su momento, un opositor hoy sistemático del mandatario, el investigador: José Antonio Crespo.
Con Felipe Calderón, aseveró el de Tabasco, hubo más muertos que detenidos en su terrible cruzada contra los narcos, ya que se liquidaba a muchas personas para acallar voces.
Insistió el actual ocupante de Palacio Nacional que se le robó la elección, ya que no había democracia plena. Mientras los gobernadores panistas, asistentes al acto, callaban. Seguramente Felipe se retorcía de coraje.
El INE, señaló López Obrador, tiene que hacer su trabajo, pero “estamos en una nueva etapa y no se puede poner vino nuevo en botellas viejas” (La Jornada, 24 de marzo).
Estuvieron presentes en el acto, el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, y la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien también hizo uso de la palabra, igual que la represente de la Confederación Nacional de Gobernadores (Conago), la mandataria de Sonora Claudia Pavlovich, cuya hija se casó al día siguiente en una fiesta a todo lujo-tanto que Alejandro Fernández cobró ocho millones de pesos por su actuación-, con Carlos Salinas y Enrique Peña Nieto presentes.
De inmediato, Alejandro Murat, hijo de un gobernador de Oaxaca, (José, uno de los que elaboró el Pacto por México), dijo que no estaba de más firmar un acuerdo de esa naturaleza y siempre era oportuno ratificar la importancia democrática. Abundó que eran necesaria más la unidad en lugar de destruir y dividir.
Algo lógico si sabemos que una de las entidades a donde más ha viajado Andrés Manuel, es Oaxaca.
Francisco Javier Cabeza de Vaca, de Tamaulipas, acusado de relaciones con el narcotráfico, enriquecimiento ilícito y lavado de dinero, opinó que aparte de la obviedad del documento, se debería elaborar otro para el respeto a la división de poderes y la soberanía de las entidades. Algo que muestra que el fuego le está llegando muy cerca.
Jaime Rodríguez, el antes motejado Bronco, y hoy un borrego apacible de Nuevo León, dijo claramente: “Yo sólo vine a pasear”, lo que muestra su derrota como gobernante y que no tiene futuro en la política, quien incluso trató de ser candidato a la Presidencia de la Nación.
La Asociación de Gobernadores de Acción Nacional (AGAN) lanzó algunos puntos al aire: reactivación de la salud, la economía y la educación; acelerar y concluir con la vacunación a médicos, adultos mayores y sumar a maestros con el objeto de un pronto regreso a clases, e incluir al sector turismo en los biológicos ante la proximidad del periodo vacacional.
Con toda la oposición de partidos, empresarios, inversionistas extranjeros, ONG manipuladas y más, López Obrador que goza de 65 por ciento de aceptación, más lo que se haya agregado por la vacunación y el aumento de personas de la tercera edad a nuevos estímulos mensuales, tiene un poder muy claro.
Esto habrá puesto molesto al INE y sus amigos, no obstante, los cambios que desean llevar a cabo en las contabilidades para legisladores uni y plurinominales.
@jamelendez44